LA PATRIA | MANIZALES
Para José Brayan Aguirre Yepes, el domingo debía ser un día de trabajo. Sin embargo, no asistió por motivos de salud. Al menos eso informó la familia. A las 2:00 de la tarde murió asesinado en el sector Ondas del Otún de Manizales.
Yaya o Yayita, como le decían sus amigos, laboraba en Casautos en la vitrina ubicada en la Glorieta San Rafael. Era vigilante, contratado a través de una cooperativa, indicaron en Recursos Humanos del concesionario.
En la mañana lo esperaban para que cumpliera su turno de día, pero un pariente llamó temprano a reportar que amaneció con fiebre y malestar, por lo que no podría asistir.
La empresa esperaba ayer en la mañana que se programaran las exequias, con el fin de hacer presencia y acompañar a familia. Él vivía en el barrio La Capilla de Villamaría.
Agregaron que Aguirre Yepes trabajó desde febrero de este año en la empresa. En pocas palabras lo calificaron como una persona responsable, que acató las normas cuando se le contrató, en el sentido de quitarse los piercing que tenía, durante las horas de trabajo.
El homicidio
De acuerdo con las autoridades, dos hombres persiguieron a Brayan, y a otro que lo acompañaba, desde el parque Fundadores hasta Ondas del Otún. En el sitio los alcanzaron.
Aunque el ahora occiso trató de defenderse, los dos sujetos pudieron más que él. Lo apuñalaron en el abdomen y huyeron por la Avenida Paralela. Brayan murió mientras recibía atención médica en el Hospital de Caldas.
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