LA PATRIA | MANIZALES
El 3 de octubre del 2014, un joven de 17 años fue detenido por la Policía Metropolitana de Manizales y Villamaría, acusado de asaltar un bus y amenazar con un arma blanca a un conductor de servicio público cerca a Guamal. Le hallaron un cuchillo de cocina y $44 mil del robo. En la audiencia, el Juzgado Segundo para Garantías de Adolescentes le dictó medida de internamiento preventivo por cuatro meses.
Él fue uno de los 502 menores de edad aprehendidos en la capital de Caldas, en ese año, por diferentes delitos.
El 17 de mayo de 2015 detuvieron a alias Gallina, de 17 años, presunto autor material de la muerte de Adrián Peláez Castillo, de 25 años y Juan Diego Arias, de 16, en una balacera en el sector de La Cañada (Manizales), el 23 de abril. Gallina fue el primero de cuatro menores de edad detenidos este año por homicidio. Por todos los delitos la suma va en 335.
Estos dos casos reflejan una situación que preocupa a las autoridades: la participación de los jóvenes en la comisión de infracciones contra las normas de convivencia, como el porte de estupefacientes y el robo, por nombrar solo los más comunes. Incluso, en la muerte el pasado martes del líder comunal Diego Iván Aguirre, hay un menor implicado.
"Desafortunadamente nos encontramos con comportamientos delictivos desde muy temprana edad. Son usados, por ejemplo, por redes de microtráfico como distribuidores, porque el Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes se quedó corto. Las bandas delincuenciales entienden que les va mejor si utilizan a un menor de edad, pues las sanciones son bajas. Se vuelve un incentivo perverso", manifestó Paula Andrea Sánchez, secretaria de Gobierno de Manizales.
Aseguró que está claro que el Sistema tiene un componente pedagógico, que busca resocializar al menor, rescatarlo para la sociedad y restablecerle sus derechos, pues se entiende que si delinquió es porque algo falló en el proceso de educación. Sin embargo, dijo que no se puede dejar de lado el enfoque de protección a las víctimas, pues los afectados por esos menores también tienen derecho a vivir seguros.
"Si el menor mata, viola, roba, debería ser juzgado de manera drástica como ocurre en algunos países, donde se le sanciona dependiendo de la gravedad del delito. No hacerlo o darles penas muy bajas genera sensación de impotencia e impunidad en los ciudadanos. Ya me sé los alias de muchos de los adolescentes que son capturados en los barrios de Manizales. Los aprehendemos, se van para Los Zagales y a los tres meses salen a hacer lo mismo o a cometer delitos más graves".
Pero, ¿qué hacer? Sánchez indicó que la Alcaldía insistirá en programas de convivencia y prevención, como los que ejecuta con el Centro de Recepción de Menores (ver recuadro Desde el Centro de Recepción), Jóvenes a lo Bien y Pégate al Parche, pues con un menor que salven se darán cuenta de que valió la pena.
La Secretaria explicó que en el 2012, en Gobierno en la Calle, los habitantes de la comuna Ciudadela del Norte hablaron de la presencia de pandillas, fronteras invisibles y fenómenos de delincuencia juvenil. Arrancaron por identificar, junto a la Policía, quiénes, cuántos eran y dónde se ubicaban, para generar un acercamiento.
Tras varios meses, el resultado arrojó la existencia de 39 parches de las diferentes comunas, conformado por 636 jóvenes entre 14 y 28 años (ver recuadro Sobre los parches).
Parche, según la Alcaldía, es un grupo de muchachos con nivel de riesgo de generar violencia y consumir estupefacientes. El análisis permitió identificar que el 58% provenía de familias extensas, con ausencia del papá, donde la mamá se ocupa de los gastos del hogar o están a cargo de los abuelos. Además, 7,5% pertenecen a Red Unidos o Familias en Acción; 63%, a régimen subsidiado; 32% solo estudió hasta noveno grado; 28% alcanzó el bachillerato y 9,5%, solo la primaria.
"Eso nos permitió generar interrogantes de cómo contribuir al ejercicio pleno de sus derechos, todo con el objetivo de evitar que se conviertan en delincuentes. Unos quisieron seguir, otros rechazaron el programa Pégate al Parche porque esperaban era recibir un subsidio económico. Los que siguieron entraron en un proceso de sensibilización en el que trabajaron desde los mismos lugares en el que generan inseguridad y en los que consumen".
Sánchez dijo que a 220 los lograron vincular dentro de las obras que se desarrollan en el Municipio y de 32 que empezaron un proceso con People Contact, nueve están trabajando.
Una experta indicó que a estos jóvenes se les debe brindar programas de resocialización para que rompan con esos patrones de conducta en el que el primer ámbito de violencia es la familia, ante las agresiones, el abandono de sus padres o la ausencia de ellos porque deben dedicarse al rebusque diario. Los adolescentes no encuentran espacios de comunicación, por lo que acuden a la calle, hallan sus primeros amigos, que quizá los conducen a cosas no tan santas como el consumo de drogas y el pandillismo.
La Secretaria de Gobierno manifestó que adelantan un trabajo con una psicóloga a través de las artes escénicas, con terapias de grupo, donde los integrantes de los parches estructuran sus propias vidas y generan acuerdos de convivencia con ellos mismos, otros parches, la familia y la comunidad. Un líder de la comuna Ciudadela del Norte destacó que han disminuido los homicidios en su sector, por lo menos los relacionados con problemas de combos y las llamadas fronteras invisibles (Líneas imaginarias que marcan los combos de los barrios y que no puede ser sobrepasadas por unos u otros, pues pueden terminar en enfrentamientos). El último que registró LA PATRIA fue en noviembre del 2013, en Solferino, con la muerte de un joven de 15 años.
"Se han reducidos los casos de confrontación y eso ya es ganancia para la ciudad. También hay aporta de otros procesos comunitarios, que nosotros apoyamos. Los que no aceptan el apoyo y se dedican a actividades delictivas son combatidos con el uso legítimo de la fuerza para aprehenderlos, judicializarlos y llevarlos a Los Zagales. Consideraron que les resulta más rentable delinquir".
La comunidad espera que esa aparente tranquilidad de los combos se mantenga y que menos jóvenes cada día terminen aprehendidos por no aprender a comportarse.
En el 2011, LA PATRIA presentó un informe en el que la Secretaría de Gobierno dijo que estos eran los combos vigentes.
- Perros Gordos y Perros Flacos, de Bosques del Norte, San Sebastián y Samaria.
- Ángeles de la Muerte, Los del Plan, La Vaga y Arcolinda, de Comuneros y Villahermosa.
- Los de la Isla, de Villahermosa.
- La 33, del Carmen.
- Los de la Calle 15, de Jesús de la Buena Esperanza.
- Los Lucuara, del Nevado.
- La 33, de La Enea.
Distribución:
Paula Andrea Sánchez, secretaria de Gobierno de Manizales, manifestó que desde el Centro de Recepción de Menores manejan cuatro programas de corte preventivo con los jóvenes hallados en la calle después de las 11:00 de la noche, los que portan armas cortopunzantes o son detectados consumiendo estupefacientes, lo que generan riñas y los que tiene problemas de convivencia escolar.
"Los captamos y son llevados al Centro de Recepción por protección y prevención. Se les brinda un espacio distinto", dijo. Estas son algunas estadísticas de los conducidos a este lugar.
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