En guardería de Anserma robaron por tercera vez

La Felicidad es el nombre del hogar grupal del ICBF ubicado en la carrera cuarta entre calles 4 y 5 de Anserma, a un costado de la escuela Sucre y a dos cuadras del Parque de Robledo. El sábado pasado en la noche delincuentes ingresaron al lugar y cargaron con el mercado que había para 15 días. Al parecer se subieron por la puerta principal y luego violaron las chapas internas.

La guardería reúne cuatro hogares de Bienestar, cada uno con 12 niños. Según Luz Mery Mejía Salazar, coordinadora en asesoría y acompañamiento del ICBF, es un robo anunciado. “En varias oportunidades he acudido a la Oficina de Infraestructura de la Alcaldía para que mejoren la seguridad, pero me dicen que no hay personal, que luego vuelven, y ahí tenemos las consecuencias. Lo peor es que es la tercera vez que nos pasa en lo que va del año”, se quejó.

Los otros dos robos fueron en enero y febrero. Siempre se les han llevado el mercado y los elementos de aseo. “Por fortuna esta vez no se llevaron las licuadoras ni los utensilios, aunque el volumen del mercado que hurtaron fue  mucho”.

Mejía afirma que desde un principio se detectó que esta era una edificación insegura, debido a que por los muros exteriores pueden ingresar con relativa facilidad los amigos de lo ajeno. “Las chapas que tienen las puertas que dan al patio parecen de una alcoba, la puerta de ingreso al hogar carece de una malla de protección, igual que el muro que comunica con la escuela Sucre”.

Fumaron y comieron
En Anserma llovió desde el sábado en la noche hasta la madrugada del domingo, situación que, al parecer, favoreció la acción de los ladrones. Además de la afectación a los 48 niños, también se llevaron el mercado que había para el hogar comunitario de la vereda El Horro, que estaba listo para despacharlo.

Precisamente, cuando la coordinadora llegó el domingo en la mañana a enviar esta carga, encontró la cocina desordenada y se dio cuenta de que los habían perjudicado una vez más. De inmediato les avisó a las autoridades.

Se percató de que los ladrones tuvieron tiempo de fumarse unos cigarrillos y comer algunas galletas, pues los residuos estaban en el piso de un salón. Lo único que ella advierte es que, de no reforzarse la seguridad, continuarán los saqueos.

Caso reciente
A este robo en el hogar grupal La Felicidad se suma el perpetrado hace 15 días al restaurante de la escuela de la vereda El Pensil, muy cerca al casco urbano de Anserma. Allí los ladrones también se llevaron el mercado y dejaron sin almuerzo a los niños del programa de restaurante.