LA PATRIA | MANIZALES
En la cárcel Doña Juana, de La Dorada, los internos decidirán hoy, por votación, si adelantan una huelga de hambre indefinida. Los detenidos se muestran inconformes por diferentes aspectos que, consideran, vulneran sus derechos.
Rubén Darío Iregui González, director del centro de reclusión, explicó que todos tienen derecho a protestar y hay que respetar las huelgas.
"Creen que con hacer arrojar la cantidad de comida que tocará desperdiciar se hará mucho, porque igual toca prepararla. Verificaremos la asistencia para los internos que se vayan deshidratando o descompensando", dijo.
LA PATRIA habló con ambas partes para conocer las peticiones y las respuestas de la institución, a través de Iregui González.
Quejas
- Problemas con la atención en salud y la entrega de medicamentos.
- Poco tiempo para las visitas.
- Mala ventilación, soportan temperaturas superiores a los 40 grados.
- Daños en las duchas.
- Problemas con programa de visitas virtuales.
Respuestas
- Las cosas han mejorado. La Fiduprevisora lleva dos meses y tiene personal asistencial: tres médicos las 24 horas, una odontóloga, una higienista oral, dos enfermeras jefes y cinco auxiliares. Es verdad que hay citas con especialistas represadas, pero a diario se sacan dos o tres internos para Manizales e Ibagué para valoración. Los medicamentos nunca van a ser suficientes.
- A partir del próximo fin de semana se tendrán visitas cada ocho días: un fin de semana de hombres y el otro para mujeres. En cuanto a las conyugales, acá tenemos unas áreas especiales acondicionadas y privadas. Es de una hora.
- Los internos no tienen ventilación en sus celdas, pero por un problema de infraestructura, pues como se trata de una cárcel de alta seguridad, no existe la posibilidad de tener conexiones. Acá hay gente con condenas de 30, 40 años, con hasta 168 homicidios y las condiciones de disciplina son diferentes a otros establecimientos.
- Existe un espacio para duchas sociales, por llamarlas así. Sin embargo, mantenían abiertas toda el día. Acá pagamos $60 millones de agua al mes. Como no había control, decidimos pasar la llave para otro sitio y mantenerla cerrada.
- El trámite lo deben hacer el interno y la familia. Es un programa para que tengan más acercamiento quienes estén lejos de sus seres queridos. Hacen la solicitud y nosotros la analizamos. La idea es que los familiares se acerquen al centro de reclusión del municipio donde viven, se conecten por Skype u otro programa que tiene el Inpec y puedan verse con el detenido.
La cifra
Doña Juana tiene capacidad para 1.524 internos, pero alberga a 1.583, un hacinamiento del 3,9%.