LA PATRIA | LA DORADA
Era el último día del contrato de rocería para el doradense Álvaro Ardila, de 50 años, pero a pocas horas de concluir la jornada un ataque de abejas no le dio tiempo de reaccionar y perdió la vida, debido a las múltiples picaduras que sufrió.
El caso ocurrió el pasado viernes a las 2:15 de la tarde en la finca Montañitas, vereda Carbonero Alto, de Puerto Boyacá. La labor la desarrollaba en compañía de familiares, cuando se vieron rodeados de abejas.
Tres trabajadores alcanzaron a lanzarse a un caño, pero Ardila fue el principal blanco de las abejas, las cuales se ensañaron contra su humanidad.
Familiares y compañeros de trabajo corrieron a buscar veneno para alejar a los insectos. Cuando llegaron de nuevo a la escena lo encontraron moribundo y convulsionaba.
Los labriegos se comunicaron con Bomberos de Puerto Boyacá, pero cuando estos se desplazaban hacia el lugar, les comunicaron que a Álvaro lo trasladaban en una camioneta de la finca donde laboraba.
La víctima de las picaduras murió antes de que pudiera recibir atención médica. Cuando lo pasaron a urgencias del hospital José Cayetano Vásquez de Puerto Boyacá, el personal de salud determinó que ya no tenía signos vitales.
Un pariente dela víctima, quien también sufrió picaduras, expresó: “Hoy era nuestro último día de trabajo, pues ya terminábamos con las labores para las que habíamos sido contratados y nos devolvíamos para La Dorada”.
Álvaro Ardila vivía en el barrio Las Margaritas del puerto caldense.
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