Condenada exgerente de hospital de Pensilvania (Caldas)

LA PATRIA | MANIZALES

Un contrato para la consecución de una ambulancia tiene hoy en prisión domiciliaria a la exgerente del hospital de Pensilvania Soryanelly Aristizábal Ramírez, condenada ayer a seis años y seis meses, por peculado por apropiación e interés indebido en celebración de contratos.

La sentencia la dictó el Juzgado Quinto Penal del Circuito de Manizales, quien a su vez se declaró impedido para continuar con el proceso, ya que al mismo está vinculado Germán Darío Pareja Bustamante, conocido por el fallido concierto de Don Ómar.

Mientras que la exgerente aceptó cargos a través de un preacuerdo con la Fiscalía, Pareja Bustamante continúa en el proceso, el cual avanzará hacia su etapa de juicio, aunque la defensa podría intentar que se declare la prescripción de la acción penal, ya que los hechos se originaron en el 2007.

El cuestionado empresario prometió vender una ambulancia al Hospital de Pensilvania, pero nunca la entregó, pese a que recibió anticipos.

La ambulancia

A comienzos del 2007 se evidenció que el Hospital de Pensilvania requería una nueva ambulancia. Así lo expuso la exgerente a sus superiores, por lo que se iniciaron gestiones para reemplazar la que había.

El primer paso fue vender la existente. El valor del vehículo se calculó en cerca de $19 millones. Surgió un comprador. Una empresa, que hoy está liquidada, la cual aceptó recibir la ambulancia vieja y dar una de modelo 2006, que costaba $96 millones.

Meses después se dio un negocio entre particulares, en el cual Germán Pareja recibía como cesionario la parte como vendedor de la ambulancia.

En la sentencia, el juez Penal del Circuito llamó la atención acerca de que el proceso tendía a favorecer los intereses del vendedor. Además, se incumplieron las obligaciones legales establecidas para la contratación estatal.

Las irregularidades

Se acordó el negocio sin la disponibilidad presupuestal completa, pues aún no se tenían unos recursos que esperaban del entonces Ministerio de Protección Social, ni de la Dirección Territorial de Salud de Caldas (DTSC).

De igual manera, se pactó que el contrato se ejecutaba en un mes, pero los tiempos se alargaron en medio de firmas de tres otrosí y una suspensión temporal de la compraventa.

En el 2008 Pareja recibió un anticipo de $13 millones, pero argumentó que estaba difícil conseguir un chasis para ensamblar la ambulancia.

Luego de recibir el dinero, el vendedor jamás volvió a reportarse. Se le enviaron comunicaciones, se le llamó a su teléfono, pero no contestaba. El Hospital hizo efectiva la póliza de garantía que debe constituir cualquier contratista.

El juez señaló que para la época existían mejores opciones para la adquisición de ambulancias, a mejores precios y especificaciones. Sin embargo, el contrato se le adjudicó a una firma sin experiencia en esta área.

Continúa en el proceso

Pareja Bustamante aún debe responder por celebración indebida de contratos y abuso de confianza. En su caso mantiene la presunción de inocencia hasta que un juez dicte sentencia, que puede ser absolutoria o condenatoria. De otro lado, debido al tiempo transcurrido, podría buscar la cesación de la acción penal por prescripción.