LA PATRIA | MANIZALES
Todo indica que un abusador estudió los movimientos de su víctima. El sujeto, que según los testigos, aparentaba unos 30 años, llegó a la sede de la Fundación Social Susuerte a las 6:30 de la mañana, del pasado miércoles, justo cuando una bella mujer intentaba abrir el lugar y la calle estaba sola.
En ese momento, el hombre la intimidó con un revólver y la obligó a ingresar. De no ser porque minutos después llegó una compañera, quien vio lo que sucedía y pidió auxilio, el sujeto la hubiera violado. La bulla de la mujer retumbó por toda la cuadra. Un joven que pasaba por allí, al verla asustada, pero ignorando lo que ocurría, gritó: “¡cójalo, cójalo!”.
Mientras se subía sus pantalones, el presunto violador aceleraba el paso por la carrera 23, intentando perderse por la calle 52. Un supervisor de vigilancia ingresaba a su empresa, pero al escuchar la algarabía, persiguió al individuo. Lo iba a detener. Sin embargo, tuvo que retroceder, pálido y asustado, cuando el tipo le apuntó con el arma. El guarda no tenía revólver en ese instante, por lo que no le quedó otra opción que dejarlo escapar para salvar su vida.
Cuentan los vecinos de la zona, que en el momento del alboroto, a tan solo una cuadra, dos policías atendían un accidente de tránsito sin gravedad. Sin embargo, permanecieron quietos, a pesar de los reiterados gritos de quienes presenciaban la fechoría, lo que facilitó que el presunto abusador huyera.
Según el coronel Mario Fernando Guerrero Fonseca, comandante de la Policía Metropolitana, ellos informaron a la patrulla del cuadrante y describieron las características del sujeto. De inmediato, llegaron los uniformados.
A las 7:00 de la mañana, el lugar se llenó de curiosos y agentes de la Sijín, quienes buscaron en los alrededores videos de las cámaras para identificar al sujeto.
El coronel Guerrero Fonseca espera que la víctima denuncie a su agresor para capturarlo y judicializarlo.
Santiago Giraldo, gerente de Susuerte, pidió a las autoridades que vigilen más este sector de la Avenida Santander, porque permanece sin policías en las horas críticas, lo que facilita el accionar delincuencial.
El coronel Guerrero Fonseca desmintió al gerente de Susuerte al asegurar: “si hay algún sitio vigilado en Manizales, es la Avenida Santander, donde tenemos 35 policías, funciona el Plan Cuadrante, el Plan Visibilidad. Nos quedaría complicado poner un agente en cada oficina de chance. La recomendación es que se conecten al CDA de la Policía y que tengan el número celular del cuadrante para alertar a tiempo. La niña víctima lo no tenía”.
Giraldo aseguró que la mujer afectada recibe acompañamiento psicosocial de la empresa.
Estudiantes del colegio Lans femenino denunciaron que hace seis años son agobiadas por un sujeto de unos 50 años, quien sale en toalla de una casa vecina al centro de estudios, se la quita, como si estuviera bronceándose, y le muestra sus genitales a las estudiantes de primaria. El coronel Mario Fernando Guerrero, comandante de la Policía Metropolitana de Manizales, señaló que varios investigadores llevan seis días en esa zona tratando de detectarlo pero, al parecer, no ha vuelto a salir desnudo.
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