CIDH escuchó caso de abuso policial en Manizales

LA PATRIA | MANIZALES

Un caso de Manizales de presunta violación a los derechos humanos por la fuerza pública escuchó de forma directa la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en la visita de trabajo, que finalizó ayer.

Los hechos relatados ante el organismo internacional ocurrieron el 20 de mayo, en las primeras horas de la mañana, tras la detención de varios integrantes, en su mayoría jóvenes, del Colectivo de Derechos Humanos, que acompaña el desarrollo de las protestas.

Laura Juliana Beltrán es la joven que viajó a Bogotá en compañía de un apoderado judicial, el abogado Rubén Darío Cuervo Londoño. La cita se cumplió en la tarde del miércoles, luego de la reunión con el comité de paro.

El apoderado explicó que la solicitud para ser escuchados se inscribió la semana pasada y que el martes en la noche recibieron una respuesta en la que se informó que debían estar a las 5:00 p.m. del día siguiente en Bogotá.

Cuervo Londoño manifestó que el objetivo no solo era relatar el caso puntual sobre las agresiones que recibió Laura Juliana, sino poner en contexto de los miembros de la visita de trabajo los sucesos relacionados con el objeto de la entrevista.

Los hechos Laura Juliana Beltrán hizo parte de un grupo de 12 defensores de Derechos Humanos que terminó detenido por agentes del Esmad y conducido a las instalaciones del CTP.

Según su relato, ese día recibieron agresiones físicas y verbales. Estos hechos se dieron en la madrugada, en el sector de La Fuente, posterior a una confrontación entre manifestantes y uniformados que se desarrolló en la glorieta de la Terminal de Transportes.

En este sentido destacó que se disfrazó la detención arbitraria como un traslado por protección. “Lo del 20 de mayo fue la gota que rebozó el vaso”, porque además de los ataques verbales y físicos, también hubo presión psicológica, afirmó en entrevista a la Radio Nacional, previo a su viaje.

En la actualidad, señaló, los colectivos de derechos humanos continúan en campo, es decir, al tanto del desarrollo de la protestas, pero temen por la integridad propia, luego de esos sucesos.