LA PATRIA | MANIZALES
Por lo general, los asesinos siempre regresan al lugar de los hechos para verificar si su víctima quedó viva. Ese dicho, propio de la investigación criminal, se cumplió en las cuatro detenciones que realizó la Policía en la noche del domingo en Barrios Unidos.
Mientras los agentes del CTI inspeccionaban el cadáver de Diego Jhoan Giraldo Zapata en la cancha de ese barrio, a una cuadra de la escena del crimen, fueron detenidos cuatro individuos que se movilizaban y merodeaban en dos motos por la carrera 28a con calle 14.
Ellos serían los que minutos antes tomaron justicia por su cuenta, al matar con múltiples disparos y puñaladas a Diego Jhoan Giraldo Zapata, de 21 años, cuando este trababa de huir, luego de dispararle en cinco oportunidades a Marleny Gómez Loaiza, de 45 años, quien veía un cotejo de fútbol en la cancha de ese barrio, a las 7:10 de la noche del pasado domingo.
El agresor fue asesinado por otros criminales. Su cuerpo inerte yacía en una portería de la unidad deportiva, donde cada ocho días se juega un torneo y en el momento de la balacera se cumplía con un encuentro. Al parecer, los justicieros huyeron con el arma con la lesionaron a Marleny Gómez Loaiza.
A dos sujetos, de 19 y 33 años, les inmovilizaron una moto Suzuki AX100 y les encontraron varias dosis de rivotril, medicamento psiquiátrico que algunos adictos usan para drogarse. Llevaban, además, clorhidrato de cocaína y un revolver Smith & Wesson calibre 38 con 3 cartuchos. Su captura se produjo, precisamente, por porte ilegal de armas de fuego, pero hay varios indicios que los vinculan al crimen.
Alias Fuego Verde, el detenido de 33 años, es sobrino de Marleny Gómez Loaiza. Dos de los cuatros aprehendidos, de 13 y 15 años, quedarán en un centro de protección de menores, informaron las autoridades.
Según la Policía, alias Fuego Verde pagó diez años de prisión por homicidio en la cárcel La Picaleña, del Tolima. El detenido de 19 años también estuvo preso por porte ilegal de armas de fuego.
“Con estas detenciones le devolvemos la tranquilidad y la seguridad a Barrios Unidos”, manifestó el coronel Mario Fernando Guerrero Fonseca, comandante de la Policía Metropolitana de Manizales y Villamaría.
Por ahora, las autoridades hacen pesquisas en la zona del crimen para esclarecerlo. También esperan los resultados de la necropsia del cuerpo de Diego Jhoan, lo que permitirá comprobar si las balas del arma incautada concuerdan con los orificios producidos por los tiros que tenía su cadáver.
Carlos Humberto Orozco, secretario de Salud de Manizales, informó que la mujer herida en la cancha de Barrios Unidos permanece en estado crítico. Recibió tres balazos en la cara, uno en el dorso y otro en su mano. Hasta ayer a las 5:00 de la tarde los galenos de la Clínica Santa Sofía intentaron intervenirla quirúrgicamente, pero no fue posible, por su complejo estado de salud.
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