LA PATRIA | MANIZALES
Alias Cacha, de 25 años, no solamente escondía y vendía la marihuana en sitios distintos para evadir a las autoridades, sino que para evitar que los perros antidrogas encontraran la cripa, la cubría con excremento humano. Ayer en la mañana lo capturaron.
Tras un allanamiento que los investigadores de la Sijín de la Policía de Manizales efectuaron en una vivienda del barrio Fanny González, detuvieron al presunto expendedor con cuatro kilogramos de la droga, avaluados en $1 millón 600 mil, que que tenía distribuida por su habitación, cocina y sala.
Además le encontraron 15 cartuchos calibre 22, una gramera digital y $58 mil, posiblemente producto de la venta.
Durante la investigación, que duró aproximadamente 20 días, los agentes determinaron que Cacha escondía la marihuana en su vivienda, pero que se movilizaba en una moto para expenderla en los barrios de la Ruta 30.
Los testimonios de los ciudadanos y consumidores fueron determinantes para detener a este hombre. Sus clientes preferidos eran los universitarios, a quienes les vendía cada dosis en $5 mil.
Tendrá que responder ante las autoridades judiciales por fabricación, porte y tráfico de estupefacientes.
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