LA PATRIA | MANIZALES

José Ever Osorio Vargas, quien estuvo secuestrado por las Farc, pretendía $682 millones de los $2.500 millones de la recompensa del exguerrillero Pedro Pablo Montoya Cortés, alias Rojas. El proceso llegó hasta el Tribunal Administrativo de Caldas. Sin embargo, sus aspiraciones de indemnización no prosperaron.

Al chinchinense lo secuestraron el 15 de junio del 2002 en La Violeta, vía Manizales-Chinchiná. Fue liberado el 3 de agosto del 2003 en Sonsón (Antioquia). Por eso demandó a la Nación, el Ministerio de Defensa y la Fiscalía. Su verdugo fue Rojas, recordado por matar y cortarle la mano a Iván Ríos, miembro del secretariado de las Farc, con el fin de lograr una recompensa.

El demandante consideró que se cometieron errores, pues a Rojas le consignaron parte de la recompensa ($800 millones), sin tener en cuenta que ya había procesos de reparación de víctimas en curso, incluida la de él.

Por ese secuestro, un juzgado de Manizales condenó al exguerrillero, el 12 de noviembre del 2010, a 31 años de cárcel. Además, le reconoció esa indemnización a la víctima: $350 millones por daños materiales y $332 millones por los morales. El fallo se confirmó el 14 de diciembre del 2011 y no se fue a casación.

Cuando el afectado se enteró de la desmovilización de Rojas, el 5 de marzo del 2008, lo denunció para que se adelantara una investigación penal y se tramitara una reparación por su plagio. El 25 de julio de ese año le desembolsaron la plata al exguerrillero y le consignaron. De inmediato lo retiró, pese a que había procesos de reparación pendientes.

Demandante y demandados buscaron una conciliación en julio del 2013, pero resultó fallida. El proceso avanzó en el Tribunal, hasta que en días pasados se negó la solicitud del exsecuestrado, a quien le exigieron en esa época $6 mil millones por liberarlo. Estuvo encerrado junto al pacoreño Daniel Serna, ya fallecido; Nelson Orozco, de Belalcázar, asesinado; y una niña de tres años, de Aguadas, liberada.

El Tribunal consideró que el Ministerio de Defensa no incurrió en ninguna omisión, pues no mediaba en ese momento orden alguna de embargo.

"Solo hasta el 12 de diciembre del 2008, cuando mediante providencia el Fiscal Segundo Especializado procedió a resolver la situación jurídica de Rojas, imponiéndole medida de aseguramiento, se ordenó el embargo y secuestro de los beneficios económicos entregados a título de recompensa".

Añadió que para la fecha cuando tuvo a su disposición el dinero, el 25 de julio del 2008, no había solicitud procedente de medida de embargo. El Tribunal le ordenó al demandante pagar $3 millones 410 mil a favor de las partes demandadas.

El secuestro

A José Ever Osorio Vargas lo interceptaron a las 3:00 de la tarde, cuando viajaba en una Toyota Prado. Lo abordaron cinco hombres, en un campero, que se identificaron como miembros del DAS. Le quitaron los papeles, lo amarraron y se lo llevaron por la vía a Cementos Caldas.

Lo subieron a una mula y lo llevaron ante alias Rojas y alias Maravilla. El primero ordenó trasladarlo a Arboleda (Pensilvania). Después de varias negociaciones y de pagar el rescate, unos $150 millones, lo liberaron.