LA PATRIA | MANIZALES
Mil 802 días pasaron para que la Fiscalía les imputara cargos a tres exfuncionarios de Aguas de Manizales por homicidio culposo y lesiones personales culposas en concurso homogéneo, por la tragedia del barrio Cervantes, en la que murieron 48 personas.
Casi cinco años transcurrieron y estuvieron a 24 días de que precluyera la responsabilidad por las 10 personas que resultaron lesionadas en el hecho.
Ayer, hacia las 9:50 de la mañana, en la sala 2 del edificio de la Judicatura, 48 asistentes, entre abogados, familiares de víctimas y curiosos, escucharon atentos la imputación de cargos que adelantó la Fiscalía 13 Seccional.
Pesadilla
La fiscal enumeró una a una a las víctimas del deslizamiento y recordó las causas de los decesos. A medida que avanzaba se escucharon los sollozos de quienes perdieron a sus seres queridos y se veían obligados durante el trámite de la audiencia a recordar los hechos dolorosos de ese 5 de noviembre del 2011.
Luego fue el turno de dar los nombres de los 10 lesionados, sobre el tiempo de recuperación que tuvieron, y las incapacidades físicas permanentes que algunos sufrieron o los problemas psicológicos que esto les acarreó.
En primera fila estaban los padres de Nayibe Rendón Noreña. Cogidos de la mano se intentaban dar fortaleza tras perder a su hija, de 17 años.
Tras leerles los cargos a Álvaro Andrés Franco Arias, gerente de Aguas entre el 2008 y 2012; a Diana Gómez Zuluaga, subgerente de servicio al cliente entre el 2005 y 2012; y a Sebastián Henao, subgerente técnico entre el 2003 y 2012, la fiscal les explicó las penas que podrían enfrentar y los beneficios de aceptar cargos.
Ninguno se allanó. La desazón se apoderó de las familias afectadas y algunos insultaron a los abogados de los imputados. A la salida aseguraron sentirse decepcionados.
Los padres de Nayibe sostuvieron que el dolor por la pérdida de su hija seguía y que no ver una pronta solución aumentaba su incertidumbre. Ellos, como los otros familiares, saben que se avanzó, pero como lo expresaron, esperan que Juan Manuel Llano y Jorge Mario Amariles, alcalde y secretario de Obras Públicas de la época, también pasen al banquillo de los acusados.
Posible negligencia
En el 2013, investigadores de la Universidad Nacional determinaron que dos tornillos en mal estado, por falta de mantenimiento, provocaron el desprendimiento de la tubería.
Entre las 3:34 de la mañana y las 6:30 de la mañana del 5 de noviembre se registraron nueve llamadas al 116 de Aguas de Manizales, en las que vecinos de Cervantes se quejaron de fugas de agua y luego avisaron sobre el derrumbe.
Al parecer, no hubo respuesta oportuna e, incluso, a otros les respondían con un mensaje grabado. Hasta cuando solicitaron que cerraran el fluido de agua les ignoraron la solicitud.
Borrada
De las nueve llamadas que se recibieron en el 116, una, a las 6:09 de la mañana, se borró.
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