LA PATRIA | MANIZALES
El samaneño Julián Andrés Agudelo Quintero, de 35 años, fue asesinado el miércoles en la vía Cali-Tulúa. El caldense se desempeñaba como conductor de un carrotanque.
Era casado y oriundo de la vereda Limones, ubicada en la vía hacia Pensilvania. Dejó tres hijos: una niña de 15 años, un menor de 5 y otra de 2. Su cuerpo fue llevado ayer a Samaná y en la tarde se cumplieron las honras fúnebres en el templo San Agustín.
Un grupo especial de la Sijín de la Policía asumió la investigación para determinar los móviles y responsables del homicidio. Según informó El País de Cali, no se descarta que detrás de este crimen estén miembros de la columna móvil Alirio Torres de las Farc.
Añadió que el ataque fue a las 10:00 de la mañana, a la altura del cruce vial que conduce a los corregimientos de La Marina y San Rafael, en donde el transportador fue interceptado por un par de pistoleros que se desplazaban en una motocicleta.
Agudelo Quintero, gravemente herido, alcanzó a maniobrar el carrotanque de color azul y de placas STH-071 a lo largo de dos kilómetros, hasta llegar hasta el barrio Estambul, en donde fue auxiliado por una patrulla de la Policía que lo trasladó en una ambulancia hasta la clínica María Ángel. Allí falleció minutos después.
En los mismos hechos resultó herido en el rostro el veterinario Luis Felipe Betancourt, de 30 años, quien fue trasladado hasta la clínica San Francisco.
Mientras que una mujer, que también se trasportaba en la cabina de ese vehículo y que no fue identificada por las autoridades, salió ilesa.
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