Agonizó durante 41 días mujer herida en Chinchiná

Foto | Cortesía | LA PATRIA
Luz Elena Vergara

La lucha por la vida de Luz Elena Vergara, de 31 años, terminó en la madrugada del jueves, luego de permanecer 41 días internada en el Hospital Santa Sofía de Manizales.

A la mujer, de 31 años y oriunda de Pereira (Risaralda), la ingresaron al centro asistencial el pasado 23 de noviembre con dos heridas de bala: una en el hombro y otra en el abdomen que le perforó el páncreas y parte del hígado.

Su mamá, María Gladis Vergara, viajó desde la capital de Risaralda para acompañarla todo este tiempo. Ella contó que su hija vendía jugos en Manizales y los fines de semana se iba para Chinchiná a trabajar en el bar El Romance.

Al parecer su hija estaba amenazada por otra mujer que también trabajaba en ese local de la carrera 9 con calle 6. Sin embargo, otras versiones señalan que Luz Elena se había peleado con un hombre que a diario la acosaba.

De estas amenazas nunca hubo denuncias. María Gladis solo las conoció el jueves, durante el funeral de su hija. "Nunca quiso contarme dizque para no preocuparme", contó.

Dos tiros

El reporte de las autoridades indica que a Luz Elena Vergara la atacaron a las 5:05 de la tarde del sábado 23 de noviembre dentro del bar El Romance.

Personas que se encontraban por ese sector de la Galería de Chinchiná, relataron que un hombre llegó hasta la mesa donde la meretriz estaba sentada y, acercándole el arma al torso, le disparó. Luego le disparó de nuevo en el hombro izquierdo.

En medio del desorden, el asesino agarró de la mano a una mujer a la que le dicen la Choneta y se fue del lugar.

Por la gravedad de las heridas a la víctima la remitieron a Manizales, donde murió. Las autoridades hicieron la inspección judicial del cadáver a las 3:40 de la mañana del 2 de enero.

Los familiares se llevaron el cuerpo para Pereira, donde la velaron en la funeraria Jardines de Renacer.

Familia

María Gladis Vergara, madre de la víctima, cuenta que su hija deja tres hijos. "Nuestra situación es muy triste. Nosotros vivimos en un rancho en el barrio Monserrate de Villasantana (Pereira) y ella trabajaba para sostener a sus hijos. Uno de ellos cumple hoy 5 años, y todavía espera a que su mamá llegue para organizarle la fiesta".