LA PATRIA | MANIZALES
En Chinchiná y Samaná hay familias de luto por la muerte de sus seres queridos, luego de accidentes de tránsito en los que se vieron involucradas las motos.
Chinchiná. Andrés Felipe Yepes Varela, de 19 años, murió el pasado domingo en la noche, después de estar cuatro días hospitalizado en Manizales. Hace un mes se lesionó un tobillo en su moto, lo remitieron al Hospital San Marcos, donde le practicaron una cirugía y le dieron de alta. En adelante se quejó de un fuerte dolor de cabeza, que al parecer desencadenó en un aneurisma cerebral, según contó un amigo.
"Dos semanas después de sufrir la lesión se comenzó a quejar, lo volvieron a llevar al Hospital y le mandaron unas pastas. El Miércoles Santo se agravó, por lo que lo remitieron a Manizales y entró en crisis. El domingo murió a las 8:30 de la noche".
El traslado del féretro al cementerio central se hizo en medio de una caravana de motos. Cuando pasaron por el café Iris pararon para dedicarle una canción. "Era buen compañero y lo queríamos mucho”, dijo un conocido.
Trabajaba comercializando madera y no tenía hijos.
Chinchiná. Gustavo Gutiérrez Cardona, de 80 años, es otra víctima. Lo atropelló una moto en la carrera 9 con calle 12, del centro de Chinchiná, el pasado 19 de marzo.
El señor trató de cruzar la calle y una Suzuki AX100 lo embistió. Sufrió politraumatismos, por lo que el Cuerpo de Bomberos lo trasladó al Hospital San Marcos. El conductor tuvo lesiones menores.
Por la gravedad de sus heridas, a Gustavo lo remitieron a Manizales, y el lunes falleció durante una intervención quirúrgica. Gutiérrez Cardona no tenía familia. Vivía con una señora que lo acogió en su casa.
Sus exequias se cumplieron ese mismo día, a las 4:00 de la tarde, en la Catedral Nuestra Señora de Las Mercedes.
Samaná. El pasado domingo se llevaron a cabo las exequias de José Ubeimar León Llano, samaneño que murió atropellado por un camión el Jueves Santo en el barrio Desepaz, al oriente de Cali.
León Llano, de 45 años, se desplazaba junto con un vecino en moto. Por no detenerse en un pare lo embistió un vehículo. Era el tercero de ocho hermanos, soltero y sin hijos.
Vivió durante 11 años en una finca de Manizales donde cultivaba café, plátano y árboles frutales. Luego trabajó en una empresa transportadora en Pereira. En Cali ajustaba mes y medio como empleado de un supermercado.
Manizales. Una tractomula se quedó ayer sin frenos en la vía Manizales-Fresno, sector de Cerro Bravo, a unos 40 kilómetros de la capital de Caldas. En un intento para no irse al abismo, el conductor chocó contra la montaña rocosa y rebotó. Quedó al borde de la ladera.
Al conductor, José Alberto Santofimio, de 50 años, lo rescataron de la cabina donde quedó atrapado y lo remitieron con trauma craneoencefálico severo y heridas en tórax, a la Clínica San Marcel. Su estado es grave. Dos personas más que lo acompañaban resultaron con múltiples traumas y se encuentran estables: José Eliécer Henao Vergara, de 38 años, y Mauro Antonio Pulgarín, de 52 años. El vehículo cargaba hierro y se dirigía desde Dosquebradas hasta Manzanares.
La emergencia fue atendida por la Unidad de Gestión del Riesgo a través de GER, Bomberos y Defensa Civil.
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