LA PATRIA | MANIZALES
Víctimas de la violencia que tuvieron que dejarlo todo en Samaná y Pensilvania y escapar hacia otros territorios volvieron la semana pasada a sus tierras, en donde volverán a la cotidianidad de sus vidas.
19 familias, a quienes los grupos armados ilegales les arrebataron sus predios tomaron posesión de ellos y recibieron el título que las acredita nuevamente como propietarias.
18 de esas propiedades se ubican en la vereda el Congal, en el corregimiento de Florencia (Samaná) y una más en el corregimiento de San Daniel (Pensilvania).
Estas actividades hacen parte del proceso de restitución de tierras y cuenta con el acompañamiento de la Policía de Caldas. A través del Sistema de Seguridad Rural (Siser), la institución se encarga de garantizar la tranquilidad a las víctimas del conflicto que retornan a sus tierras.
A la diligencia de entrega acudieron además funcionarios de la Oficina de Restitución de Tierras y un juez de restitución de Pereira que se encargó de entregar el derecho de posesión. Miembros del Ejército dieron la garantía de la erradicación total de campos o minas antipersonas en los sitios.
El Siser
Es una estrategia para fortalecer la seguridad en la zona rural de Caldas. La Policía asesora a los campesinos en proyectos productivos y sirve de enlace con autoridades administrativas, entidades públicas y privadas para el desarrollo del campo, establece cuadrantes en veredas y corregimientos. Además, adopta el compromiso de difundir programas de prevención, escuelas de seguridad ciudadana y redes de apoyo.
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