Ejercicio, con moderación en aislamiento

Elizabeth R. Rojas

LA PATRIA | Manizales
 

La emergencia generada por el coronavirus trasladó las rutinas diarias de niños, jóvenes y adultos a los hogares, lo que aumentó las horas de estudio y de trabajo. Para los adultos mayores, en tanto, la imposibilidad de salir, los hizo más sedentarios. Y eso lleva a posibles molestias físicas.

Sobre los efectos de la falta de movilidad, habló el fisioterapeuta Andrés Felipe Rosas Cárdenas, profesional egresado de la Universidad Manuela Beltrán de Bogotá.

El experto también conceptuó sobre algo que -para algunos- está siendo contraproducente y es que, desde que se inició la pandemia y el confinamiento, se interesaron por realizar actividad física en sus casas, esto apoyados en páginas de Internet relacionadas y a través de redes sociales.

"La actividad física es como los medicamentos, necesita prescripción. Determinados movimientos no son para todo el mundo. No se puede hacer el primer ejercicio que se ve", detalló el candidato a magíster en osteopatía estructural en la Escuela de Osteopatía de Madrid.

Rosas sugirió que, un ejercicio mal hecho, nos lleva a tener lesiones, dolores y ciertas dificultades que -a la larga- terminan dañando nuestro organismo, lo que influye en nuestra vida diaria. Indicó que los extremos afectan.
 

Contraindicados

"En consulta refieren que están siguiendo rutinas de ejercicios, que uno puede ver que no están indicados para ellos. Lo más común es que desarrollen dolor lumbar, con afección en el nervio ciático. También he visto gente con molestias en los hombros, en los codos y hasta con desgarros musculares en distintas partes del cuerpo".

El fisioterapeuta dijo que en casa no estamos cuidando nuestras posturas (nos sentamos mal), lo que es perjudicial para el sistema esquelético y el nervioso, que terminan alterando distintas funciones.

"Hay que tener mucho cuidado con el sedentarismo de los adultos mayores, pues muchos cursan con algo que se llama sarcopenia. Así se denomina la pérdida de masa muscular que se da con el avance de la edad", puntualizó.

Según Rosas, si otros miembros de la casa pasan todo el día sentados, van a cursar con síndrome de desacondicionamiento físico. Esto entendido como "la pérdida de la masa muscular, la disminución de la capacidad pulmonar y de otras funciones".

Si no se tienen buenos hábitos de alimentación, aseguró el profesional, se comienzan a elevar los niveles de colesterol, los triglicéridos, lo que -adelante- puede ocasionar infartos.
 

En casa

Rosas aseguró que en lo que quede de aislamiento inteligente, para evitar problemas osteoarticulares y musculares, si se quiere mover, debe hacer movimientos básicos que no implican mayor esfuerzo.

"Hay que empezar con eso, a manera de calentamiento. De ahí se vale pasar a algo que mueva un poco nuestro corazón, pero nunca levantar cosas pesadas que impliquen un sobre-esfuerzo".

Quienes tengan en casa una bicicleta estática, una caminadora, una elíptica, -según el profesional-, pueden utilizarla por tiempos prudenciales. La idea es que no vayan más allá de 15 o 20 minutos de actividad.

Rosas mencionó que también se vale implementar un circuito en la casa, con estaciones. Dijo que se puede arrancar con abdominales suaves (cuatro series de 10 repeticiones); para seguir con un trabajo de fortalecimiento de brazos en lo que puede servir levantar pequeñas bolsas de arroz o botellas de agua, con las mismas series.

De ahí, agregó el experto, se puede simular una marcha por cinco minutos. Para cerrar, se vale sentarse y estirar cada pierna, sosteniéndola por 10 segundos. Repetir las estaciones, advirtió, hace que se logre un tiempo de actividad de 30 minutos al día.

"Cuando se termine se puede hacer estiramiento para evitar lo que se conoce como molimiento y lesiones. Deben tener especial cuidado aquellos con preexistencias de hernias discales".