Luka Modric fue el jugador que más brilló en la Copa Mundial de Futbol Rusia 2018, al punto que eclipsó las actuaciones de los dos grandes Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Este centrocampista croata, llevó a su equipo a la final del gran torneo futbolístico y fue galardonado con el Balon de Oro por ser el jugador más destacado llevando a Croacia, contra todo pronóstico, a una final donde fueron los “ganadores sentimentales” por haberse robado los corazones de los aficionados al futbol en el mundo entero.
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Modric, también acaba de ser nombrado mejor jugador del año de la UEFA, destronando a su ex compañero del Real Madrid Cristiano Ronaldo y al delantero del Liverpool Mohamed Salah.
El mediocampista recoge el premio después de guiar al Real Madrid a su tercer título consecutivo de la Liga de Campeones e impulsar a Croacia a la final de la Copa del Mundo, donde perdieron ante Francia.
Modric, de 32 años, recibió 313 puntos en la votación para terminar por delante del tres veces ganador Ronaldo (223pts), quien se unió a la Juventus luego de anotar 44 goles en 44 partidos para el Real la temporada pasada.
La votación fue realizada por entrenadores de la Liga de Campeones y periodistas invitados en toda Europa.
"Es un momento increíble para mí y me siento emocionado y orgulloso de haber ganado este gran premio", dijo Modric.
Ronaldo, que se unió a la Juventus fuera de temporada, fue el único candidato que no asistió a la ceremonia anual de premios celebrada durante el sorteo de la Liga de Campeones en Mónaco.
En esta misma ceremonia, David Beckham recibió el Premio del Presidente anual por sus logros dentro y fuera del campo, incluida su fundación benéfica que trabaja con UNICEF, la agencia de las Naciones Unidas para la infancia.
La ex estrella del Manchester United y del Real Madrid "usa el poder del fútbol para ayudar a niños desfavorecidos", dijo el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin.
Luka Modric, hijo de la guerra de la independencia de Croacia
Luka Modric no tuvo una infancia fácil, haber crecido en medio de una guerra fue muy duro, pero forjó su carácter humilde, centrado y lleno de la persistencia que se requiere para no desalentarse ante fracasos y reveces.
Criado en Modrici, una pequeña aldea en las laderas de las montañas Velebit, en el norte de Dalmacia, sus primeros años estuvieron marcados por la guerra. Los paramilitares serbios asesinaban rutinariamente a los croatas locales y la familia Modric, dirigida por el padre Stipe y la madre Radojka, recibieron amenazas de muerte por lo que los Modric tuvieron que huir buscando refugio en la ciudad portuaria de Zadar, donde vivieron en un hotel durante 7 años.
Algo protegido por la inocencia de la juventud, Modric simplemente siguió con el trabajo de ser un niño, hacer amigos, hacer travesuras y jugar al fútbol. Aunque él no lo sabía en ese momento, su destino estaba tomando forma.
Empezó a entrenar a los 7 años y sus sesiones de entrenamiento eran invariablemente interrumpidas por granadas y morteros entrantes. Fueron momentos realmente terroríficos, ya que todos corrían hacia los refugios antiaéreos. Por lo tanto, para garantizar que los jóvenes dejaran el campo lo más rápido posible, los entrenadores de Zadar solían ofrecer un premio al "héroe del día" al primer niño que llegaba al refugio.
Su entrenador juvenil de Zadar, Miodrag Paunovic señalo que para él siempre fue evidente que Modric estaba destinado a convertirse en un gran jugador por su perfecto dominio del balón. Sin embargo, no muchos creían en él porque era muy delgado y parecía un joven muy débil.
Pero en solo pocos años, el club más importante del país, Dinamo Zagreb, estaba cada vez más interesado en incorporarlo, y después de impresionar en un torneo juvenil en Italia, se informó que estaba en el radar de los clubes de la Serie A Juventus, Internazionale y Parma.
Zadar hizo todo lo posible para mantenerlo fuera de las garras de los demás, pero solo pudieron hacerlo por un corto tiempo, permitiendo finalmente que el joven de 16 años se uniera a Zagreb en 2001.
Modric siempre fue un jugador con una mentalidad ganadora y por eso, años más tarde, lo fichan en el Tottenham Hotspur F.C. de la Premier League, por la cantidad de 20 millones de euros.
Para el año 2012 Modric ya estaba jugando para el Real Madrid, por una suma de más de 30 millones de euros.
Sus éxitos de este 2018 lo sitúan como el jugador más relevante del año y lo más seguro es que sus victorias no cesarán y veremos mucho más de este astro del futbol en los años por venir.
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