La cultura: ausente en el discurso, presente en planes de gobierno

LA PATRIA | MANIZALES

La cultura continúa siendo esa deuda pendiente de las administraciones, pues es poco lo que se le invierte y lo que se habla de ella. Un reflejo es esta contienda electoral, que hoy cumple su primera cita, y en la que hasta ahora la cultura sigue ausente en el discurso de los candidatos a la Presidencia de la República.

Para Francisco Javier González Sánchez, especialista en Derecho Constitucional y Gestión Cultural, de la U. Nacional, sede Manizales, recordando al docente Guillermo Dabbraccio, del Programa de Gestión Cultural de dicha institución, anotó: "Los candidatos no abordan los temas de la cultura no porque no sean importantes, sino porque no saben de cultura; aunado a ello, el desinterés mostrado por los medios de comunicación y de los panelistas en los respectivos debates, dejan en evidencia el poco interés por dichos temas".

Por ello, les presentamos en este informe las principales propuestas culturales de cuatro candidatos a la Presidencia de la República (Sergio Fajardo, Rodolfo Hernández, Gustavo Pretro y Federico Gutiérrez) las cuales serán analizadas por González Sánchez.

En una mirada general el experto indicó que las propuestas están alineadas según el pensamiento y perfil político e ideológico de cada uno. "Fajardo, cultura basada en educación; Rodolfo, cultura productiva e intervención de escenarios culturales; Petro, cultura popular y pública y Fico, internacionalización de la cultura (divulgación, promoción y oferta cultural). Sin embargo, se enfocan en el activismo cultural y tecnológico, pero no en la discusión política, social y académica que implique el enaltecimiento de los fenómenos culturales, como expresión o fundamento de la nacionalidad colombiana, en términos de lo establecido por el artículo 70 de la Constitución Política, ni menos en el reconocimiento de la diversidad étnica y cultural de la Nación contenida en el artículo 7º de dicho estatuto superior", indicó González.

Asimismo, no incluyen temas fundamentales como patrimonio arqueológico, construcción de escenarios culturales, patrimonio cultural inmaterial, "ni la manera de enfrentar temas polémicos como el Patrimonio Cultural sumergido de que trata la Ley 1675 de 2013 como el caso del Galeón San José. A pesar de que Colombia pertenece a la Unesco, las propuestas no recogen la Agenda 2030 de las Naciones Unidas para el desarrollo sostenible en materia cultural y enmarcado en sus 17 objetivos", agregó.

Análisis de las propuestas

Sergio Fajardo

1. La educación artística y cultural hará parte integral y universal de los currículos de la educación básica primaria, secundaria y media. Serán los mismos artistas, profesionalizados y certificados, quienes lideren los currículos educativos. Asimismo, se crearán programas de competencias laborales en gestión cultural certificada al alcance de todos los municipios a través del Sena y el Ministerio de Cultura en alianza con universidades.

2. Empleos formales para bibliotecarios, maestros de música y artes, vigías del patrimonio y guías culturales. Se creará una planta pública para la calidad, la equidad y la descentralización de la implementación de las políticas culturales, en un modelo que permita permanencia y evaluación periódica garantizando la idoneidad del personal. El 60% de la planta serán mujeres.

3. Pondremos en marcha el bono cultural propuesto en años anteriores, como un programa de estímulo al consumo de bienes y servicios culturales en los jóvenes. Estos estímulos se traducen en subvenciones para boletas de espectáculos culturales, museos, parques arqueológicos, cine y adquisición de libros, entre otros

4. Propondremos una nueva Ley General de “Culturas”, para, entre otros, fijar los lineamientos necesarios para que haya un presupuesto básico para la cultura del 1% de los recursos de libre destinación del Sistema General de Participaciones. Haremos incrementos robustos y constantes al presupuesto del Ministerio de Cultura.

Observación: Comete el error de considerar la cultura como un apéndice de la educación, su tema bandera. La Ley general de la educación (115 de 1994) ya contempla la incorporación de la cultura en los proyectos educativos institucionales y en la agenda de la educación preescolar, básica y media. Lo que podría proponer es la aplicación de dichos instrumentos. Aunque es el único que habla expresamente de las bibliotecas, asunto que conoce muy bien, a pesar del fracaso de su proyecto Biblioteca España en Medellín, es muy loable su pretensión de dignificar la labor del personal de la cultura, pero urge un diagnóstico sobre el estado de las políticas en materia de bibliotecas dado el precario grado de lecturabilidad. Su deseo de incentivar el acceso a la cultura mediante la concesión de bonos, lo lleva a una propuesta de tipo centralista solo aplicable a ciudades capitales con alta dinámica cultural, ignorando los sectores rurales y los municipios de inferior categoría donde la oferta cultural es prácticamente gratuita. Expresamente propone derogar la ley general de cultura (397 de 1997) sin mencionar las razones, aunque se le abona su interés en incrementar los recursos económicos hacia este sector.

Rodolfo Hernández

1. Introducir la cultura y el arte en la cadena productiva del país a través del fomento de la industria creativa. En nuestro gobierno, los rubros de cultura y arte pasarán de estar en un último plano a ser protagonistas; por tal razón aumentaremos el presupuesto de inversión en estas áreas, para promover el nacimiento de pequeñas y grandes empresas.

2. Intervenir arquitectónicamente, con curaduría de arte (estética), los escenarios culturales ya existentes. Para ello se implementará un sistema de curadores avalado por expertos reconocidos internacionalmente.

3. Establecer la gratuidad en el ingreso a escenarios artísticos y culturales, como la red de museos, para niños y jóvenes hasta la mayoría de edad, o los 26 años en el caso de estudiantes universitarios activos.

4. Incentivar la pedagogía en temas culturales desde la primera infancia hasta los estudios universitarios, en un proceso que se adelantará con el fin de preservar las tradiciones orales y escritas y las costumbres ancestrales de cada una de las regiones colombianas, como una forma de conservación del patrimonio cultural y artístico.

Observación: Tiene una visión economicista y mercantilista de la cultura. Se le abona, al igual que a Fajardo, su interés en aumentar el presupuesto para la cultura, aunque cae también en propuestas demasiado centralizadas que desconocen el carácter rural. Elitiza la cultura en las ciudades capitales y establece incentivos económicos para su acceso, estableciendo incluso gratuidad en el acceso a museos. No en vano ha dicho, que de ser presidente convertirá la Casa de Nariño en un museo de arte, lo cual es a todas luces un despropósito, salvo que quiera abrir las puertas de este lugar al acceso de los ciudadanos, asunto que comprometería seriamente su seguridad. Su condición de ingeniero, lo lleva a proponer interesantes intervenciones arquitectónicas por la vía de la curaduría de arte, pero en escenarios culturales ya existentes. Al igual que Fajardo, considera la cultura un apéndice de la educación, al fomentar herramientas pedagógicas en los ciclos de la educación formal. Se destaca el reconocimiento que hace de Colombia como un país diverso y de regiones, y la necesidad de preservar sus tradiciones y costumbres, así el instrumento propuesto no sea el más idóneo.

Gustavo Petro

1. El arte popular será vinculado de manera estratégica a ofertas, planes y corredores de la política de turismo cultural, creativo y recreativo como apuesta para promocionar nuestros territorios y valoración de las prácticas tradicionales y patrimoniales. Asimismo, facilitaremos los procesos de convalidación de saberes y conocimientos en conexión con el sistema educativo, así como la formación para mejorar la preparación de artistas y cualificar la oferta de las industrias culturales en todo el país.

2. Los emprendimientos culturales y de impacto comunitario serán promovidos con financiamiento público y nos comprometeremos con la canalización de recursos mixtos y privados nacionales e internacionales para fortalecer las industrias culturales locales, así como con su proyección internacional.

3. Se fortalecerá la red pública de canales y medios regionales para la producción y difusión de contenidos culturales de alta calidad, enfatizando en las radios públicas y comunitarias.

4. Apoyaremos a los artistas en creación de contenidos para las plataformas digitales como estrategia para la dinamización de la creatividad, impulsando sectores estratégicos como la industria cinematográfica nacional, promoviendo el empleo cultural y los procesos de afirmación identitaria.

Observación: Plantea el apoyo y fomento al arte en términos “populares” y en conexión con el turismo, a pesar de los riesgos que puede traer frente a la despatrimonialización cultural que han sufrido municipios como Guatapé, Ipiales y Salento. Plantea nuevamente la posibilidad de titular y homologar saberes y conocimientos, en el marco de la flexibilidad curricular de los planes de estudio de las universidades, lo cual es una buena noticia para las personas del sector; al igual de Fajardo y Rodolfo, financiará los emprendimientos, especialmente de impacto comunitario. A diferencia de los demás su propuesta es típicamente descentralizadora al fomentar la cultura de “lo local” que es muy importante. Reconoce el difícil momento de los canales regionales y de las emisoras comunitarias en materia cultural, al pretender incrementar contenidos de calidad. Junto con Fico, son los únicos que proponen fomentar la cultura y el emprendimiento cultural digital, pero a su vez, es el único candidato que expresamente se refiere al cine nacional como un sector estratégico a apoyar. Coincide con Fajardo en el fomento y apoyo al empleo cultural y es el único que hace expresa alusión a la cultura en términos de “identidad”.

Federico Gutiérrez

1. Fortaleceremos las acciones de protección, divulgación y apropiación del patrimonio cultural, a través de la implementación de la Ley de los oficios artísticos, de las industrias creativas y culturales, artesanales, de los saberes y del patrimonio. Esto también se articulará con las apuestas de turismo a nivel nacional e internacional.

2. Afianzaremos a Colombia como escenario de eventos culturales a nivel internacional, relacionados con actividades como teatro, cine, literatura, festivales gastronómicos y musicales y aquellos que hagan parte de nuestro patrimonio cultural.

3. Consolidaremos a Colombia como centro de operaciones para la producción audiovisual en Suramérica, mediante la atracción de nuevas producciones e inversión en el sector. Para esto, apoyaremos la superación de barreras interinstitucionales que le permitan seguir creciendo al sector.

4. Apoyaremos y fortaleceremos los programas de formación enfocados a las técnicas audiovisuales del Sena. Promoveremos el apoyo de la cooperación internacional para la formación del capital humano relacionado con el sector audiovisual.

Observación: Es el candidato que más se refiere a la cultura en términos de “internacionalización”. Tanto en la divulgación, como en la formación, pero con un especial énfasis turístico y en ese sentido, coincide con Rodolfo Hernández, en ver la cultura con enfoque mercantilista. Coincide con Petro, en alentar procesos e iniciativas culturales digitales, pero asumiendo un gran y desafiante reto y es el de poner a Colombia como el principal centro de operaciones audiovisuales de Suramérica. Al igual que Fajardo, también propone una Ley, pero de artes, oficios, industrias creativas y saberes, lo cual puede ser visto como necesario e innovador. Al igual que los demás ve a la cultura como un apéndice de la educación, pero especialmente enfocada a las industrias creativas digitales y audiovisuales, que pueden equivaler a una reinvención o nueva versión de la cuestionada “economía naranja” del presidente Duque. A pesar de su propuesta de apoyo y difusión, es el único que no se compromete con la asignación de recursos económicos o al incremento de los mismos para la cultura.