Para el Partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) los gobiernos de Juan Manuel Santos y el actual, de Iván Duque, provocaron incertidumbre, indignación y frustración en los excombatientes y la comunidad al incumplir con la implementación del acuerdo de paz.

“Las diferencias políticas, estimuladas por las faltas del Estado en la construcción de una paz estable y duradera y con justicia social trascendieron al distanciamiento de algunos comandantes que anunciaron públicamente un rearme, y los cuales se salen de la línea política del Partido FARC, línea que hemos mantenido con amor, firmeza y compromiso”, pronunció ayer Natalia Agudelo, de la Comisión Técnica de FARC Manizales, como parte de un comunicado público.

Expresan que han empeñado la palabra en el acuerdo de paz y vienen luchando para que lo pactado en La Habana sea implementado. “Insistimos en que es necesario salir de la espiral de violencia, de la confrontación armada, de la guerra fratricida, escenario que afecta de forma profunda y particular a la Colombia rural, a la Colombia excluida”.

Llamados

Hacen un llamado al gobernador de Caldas, Guido Echeverri, y al alcalde de Manizales, José Octavio Cardona, a profundizar en la implementación del acuerdo, a generar una instancia colectiva entre autoridades y Partido FARC para mirar la situación de riesgo de exguerrilleros y militantes. Sostienen que un militante tuvo que salir del país para preservar su vida.

El llamado también incluye a los empresarios de Caldas, para que se vinculen a la construcción de proyectos de emprendimiento con población exguerrillera; a los partidos políticos que se encuentran en campañas electorales, a comprometerse por escrito y públicamente con el acuerdo de paz, y a la comunidad, a construir la paz como máximo proyecto colectivo de la nación.

Piden trabajo en mesa

David Martínez, miembro de la Comisión Política de FARC Manizales, expresa que solicitan instalar una mesa de trabajo en la que se mire la situación de riesgo del Partido en Caldas y que se requiere una comisión de garantías.

“Necesitamos mirar la profundización de los acuerdos de paz en términos territoriales. Es el momento en que la Alcaldía no tiene una oficina de paz y reconciliación, y es imposible avanzar en la implementación si no hay instancias que estén en dicha función. En el departamento existe una oficina, pero sin presupuesto ni mayor ejercicio en los territorios, necesitamos una Secretaría de Paz y Reconciliación. Hacemos el llamado a escenarios de confrontación, a escenarios de diálogo. El diálogo es la ruta. Nunca estuvimos tan cerca de lograr superar la noche de guerra como en este momento, no queremos retroceder”.