La complacencia es tan grave como la restricción sin criterio médico.
Incontables pensamientos, conversaciones, frases escritas y videos, se han producido sobre el comportamiento de los seres humanos, desde sus inicios hasta el presente y así sucederá por siempre. Un hecho es su desarrollo físico evidente y distinto en la actualidad, el cual tiene bases universales con las diferencias propias de las distintas razas. Otro es su manera de ser y en las pocas veces en que ha estado en el espacio extraterrestre.
Los comportamientos de los seres humanos son fuente inagotable de temas debido a sus relaciones con otros de su misma especie, cercanos o en lontananza, con los demás seres vivientes y todas las cosas especialmente las que lo rodean.
Hay comportamientos que son generalmente aceptados pero varían según el tiempo de existencia porque no es igual lo que ahora sucede, que definitivamente ha cambiado un poco o mucho según los aspectos a considerar, con lo que acontecía en los inicios del siglo XX. Sin embargo, hay cambios radicales comparados con los que sucedían en las épocas del dominio romano o del esplendor griego o de los primitivos americanos.
Un hecho que caracteriza al ser humano es su deseo de dominio a ultranza sobre el otro, hay excepciones comunitarias e individuales honrosas, y sobre la naturaleza en general.
El afán de dominar tiene facetas que lo hacen más o menos intenso frente a su congénere. Dominar por dominar no sería importante si no produjera daño en los demás ya sea en forma colectiva o personal. La historia está llena de ejemplos de la avidez dominante del ser humano con efectos desastrosos.
Una forma de pretensión de dominio que puede pasar desapercibida es la manipulación, de un ser por otro con diferentes fines entre las cuales está aquella que busca su propio beneficio, observado bajo distintas circunstancias.
A veces es un espectáculo circense y en otras la realidad supera cualquier acto de imaginación. La manipulación del ser humano se puede hacer por una interpuesta persona o por muchas simultánea o secuencialmente. Colombia proporciona una inagotable fuente de manipulaciones a las que no pocos se acostumbran y hasta se vanaglorian de la acción, ya sea perdiendo su independencia o como victimarios que generalmente actúan como en la mejor obra teatral: tras las cortinas.
Sin embargo, la manipulación es un acto indeseable por el engaño que puede producir sobre el manipulado y en terceros.
En medicina se ha ido imponiendo la manipulación de pacientes por los médicos con el fin de actuar sobre sus enfermos o agredir a terceros. Igualmente hay pacientes o sus familias que utilizan a los médicos para obtener o producir determinadas acciones que los benefician.
La manipulación puede hacerse como una única vez o como una conducta permanente, cualquiera que sea es inaceptable y antiética. Las relaciones médico paciente o médico y la familia del enfermo deben ser francas con la debida mesura que impone el trato entre personas y por mandato para el médico del Juramento Hipocrático.