La Organización Mundial de la Salud, OMS, es una entidad sanitaria reconocida y respetada, con sede en Suiza, que agrupa a más de 150 países, con una cobertura superior a 7.000 millones de personas, la cual entró a funcionar el 7 de abril de 1948, fecha anual conmemorativa del Día Mundial de Salud.
La OMS tiene independencia absoluta en su estructura, administración y proyectos, es financiada por los países y organismos internacionales. Posee seis entidades territoriales, una de ellas está en América, La Organización Panamericana de la Salud, OPS, con sede en Washington, que cuenta con representación diplomática en cada país y asesora de los gobiernos en temas sanitarios. Tiene, además, 800 instituciones y centros colaboradores distribuidos en 80 países, Colombia es uno de ellos.
Para mayo 18 y 19 pasados se programó la 73 Asamblea Mundial de la OMS, la cual se inició mediante mecanismo virtual en tiempo real, pero luego fue suspendida para ser convocada posteriormente.
Entre los temas sometidos a consideración de los delegados estaba: Enfermedades Tropicales Desatendidas. Un conjunto de 20 afecciones que se encuentran en el planeta. El trabajo de los delegados principales, casi todos ministros de salud, incluyendo el de Colombia, consistía en la aprobación del plan para controlar o erradicar, 2021-2030, estos padecimientos, comprometiendo a cada Estado.
El proyecto deberá continuar los esfuerzos realizados en el período 2012-2020, luego de que se produzca la evaluación de los resultados obtenidos por cada país. Hay que lamentar que los objetivos globales no se cumplieron, aunque en 40 países se erradicó al menos una enfermedad. Entre los logros obtenidos, Colombia eliminó casos nuevos, la oncocercosis, parásito localizado en tejido subcutáneo y transmitido por el díptero, mosquito, Simulium, enfermedad que se encontraba al sur del río Patía.
El control de las 20 enfermedades será una meta importante, junto muchas otras medidas paralelas, para lograr el Desarrollo Sostenible que consiste en: Una vida sana con la promoción del bienestar de todos en todas las edades. No se pueden olvidar las acciones sobre la pobreza; los costos de atención; el hambre; la mejoría de la alimentación en el camino de la seguridad alimentaria; la educación para todos, de calidad elevada y equitativa; agua y saneamiento básico, y asentamientos humanos dignos.
Se proponen tres estrategias para lograr las metas: Impulsar los programas existentes, intensificar las acciones, modificar los modelos operativos e intervenir en la cultura frente a las enfermedades. La meta más complicada será la promoción y financiación de las campañas contra las 20 enfermedades seleccionadas.
Varias de estas enfermedades se encuentran en el país. Se enuncian con los casos ocurridos desde enero a mayo del 2020: Rabia -agresiones por potenciales transmisores- 46.678; enfermedad de Chagas - 27; leishmaniasis en todas sus formas - 3.859; chikungunya - 371; helmintiasis, parásitos, transmitidos por el suelo; dengue - 54.192; sarna; teniasis-cisticercosis y envenenamiento por mordeduras de serpientes - 1.937.
Quedan otros datos, durante igual período, muy preocupantes que merecen igualmente una atención detenida: Intento de suicidio - 12.028; paludismo - 30.463; infección respiratoria aguda - 1.965.019; infección respiratoria aguda en UCI - 8.263; enfermedad diarreica aguda - 980.875; parotiditis - 3.333; rubeola congénita - 121; varicela - 13203; sífilis congénita - 376, sífilis gestacional - 2.198; tuberculosis - 5.587; violencia de género e intrafamiliar - 39.611.
Entonces: ¿En dónde están los resultados de la vacunación contra parotiditis, rubeola y tuberculosis? ¿Dónde están los controles gestacionales para sífilis? ¿Dónde están los programas contra la violencia intrafamiliar?
No se puede olvidar que anualmente fallecen 3 millones de personas por acción del alcohol. En Colombia, 2016, fallecieron 1.724 pacientes por cirrosis, una fase final del alcoholismo.

Nota: Con o sin Plan, Manizales es Universitaria.