Gonzalo Gallo


María y Jesús, espejos diáfanos del buen obrar a los que quiero imitar siempre en sus excelsas virtudes.
Jeshua y Mariám, los amo. Dos seres de radiante luz, de amor total, ricos en compasión y coherencia.
Su presencia en mi existir es una fuente prodigiosa de inspiración, son mis faros y mi fuente de energía.
María, madre llena de amor, tan dulce y humilde, tan servicial, muy valiente allí bajo la cruz de tu amado hijo.
Y tú glorioso Jesús, también valiente al enseñar que Dios es amor puro y no un Dios que juzga y al que hay que temer.
Tan sabias y sencillas tus parábolas, tan clara tu enseñanza sobre un amor que debe abandonar todo tipo de juicios.
En tu tiempo como ahora los credos estaban llenos de normas y vetos y tu dices claro que sólo hay que amar.
Jeshua y Mariám, gracias por su amor ilimitado, los amo, sé que me aman y solo quiero irradiar luz como ustedes.
@gonzalogallog
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015