Espiritualidad no es lo mismo que religiosidad, aunque ambas pueden caminar de la mano si de verdad amas y te amas.
Espiritualidad es consciencia clara de que eres un espíritu en un cuerpo y dedicar tiempo y energía a lo que se llama el ser.
Escribe las palabras ser, hacer y tener, una debajo de la otra, y pregúntate: ¿Cuál es mi prioridad?
Si tu prioridad es ser, entonces lo que haces le da importancia total a eso y el tener lo necesario te llega.
Si lo más importante para ti es el tener más, sucede que el hacer es para eso y tu ser se marchita o se seca como una planta sin agua.
La espiritualidad florece cuando amar es tu prioridad y eres una persona consciente, compasiva, servicial, humilde y coherente.
La espiritualidad te lleva a cultivar una relación de amor con Dios, y Él es tu amado, tu tesoro, todo en tu vida.
Eso lo puedes vivir con religión o sin ella. Está demostrado que siendo más espiritual también eres más feliz.
@gonzalogallog
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