Mañana nuestro ‘Periódico de Casa’ cumple 100 años, así que hoy escribo desde el corazón. Hablar de la historia de Caldas y Manizales es hablar de La Patria y su camino lleno de aciertos y dificultades. Por ejemplo, fue el primer diario con impresión offset en Colombia y con certificación ISO 9001. También vivió duras pruebas como los incendios ocurridos en la misma década de sus inicios y el asesinato de su subdirector, Orlando Sierra Hernández, en el 2002 al frente de sus instalaciones.
 Me siento muy orgullosa de haber hecho parte de esa historia durante 25 años. Allí crecí como persona y como profesional, y también me enamoré del mundo digital. Tuve a mi cargo la primera versión web de La Patria. Debutamos en la web en febrero de 1998 con muy pocas fotos y muchos enlaces a las noticias. Las conexiones eran conmutadas a través de las líneas telefónicas y el ancho de banda de los canales era bastante limitado. Había que estar en esta vitrina virtual para llegar a más audiencias. Lo novedoso de la web nubló el entendimiento de estos modelos de negocio, no dábamos valor a los contenidos.
 A propósito. Si quiere conocer o recordar el historial de las distintas versiones web de La Patria, visite https://archive.org/ y en la opción de WayBackMachine, digite lapatria.com. Se encontrará con una extensa línea de tiempo y al navegarla podrá visualizar la imagen del sitio web de la fecha elegida.
 Internet y su acelerado ritmo de cambios hizo posible que La Patria pasara de ser un periódico impreso, limitado a unos miles de suscriptores en Caldas y otras regiones del país, a ser un grupo de medios. Ahora llega a más audiencias a través de múltiples canales.
 El diario caldense alcanza hoy 700.000 usuarios en promedio que visitan al mes el sitio lapatria.com, 236.000 seguidores en Facebook, 82.000 en Instagram, 270.000 en Twitter, por mencionar algunos de las plataformas digitales más representativas. La Patria cuenta con 20% de lectores fieles y apasionados, que representan el 66% de sus páginas vistas, según News Consumer Insights de Google. Esto lo hace uno de los medios regionales con mayor fidelidad de sus audiencias digitales.
 Pese a esto, hoy los retos son aún mayores. La democratización de la información, que trajo consigo la red mundial de datos, hace que la oferta sea amplia y variada, aunque no toda sea de calidad. Vivimos en la era de la economía de la atención. Ahí es cuando el buen periodismo cobra valor. ¿Qué sería de una sociedad sin esto? Por eso es que estos 100 años significan credibilidad y confianza.
 Otros retos, no menos complejos, son la innovación y la transformación digitales que requieren estar a la vanguardia de los nuevos modelos de negocio. Aunque hay una cola larga de opciones para generar ingresos, las fuentes típicas de financiamiento -las que más suman en la torta- siguen siendo las suscripciones y publicidad, incluso en los escenarios digitales que han implicado cambios. Esto requiere un conocimiento profundo de las audiencias.
 Adhiero al padre Efraín Castaño, quien en su columna de esta semana propone que el Caldense del Año sea para ‘El periódico de casa’. El mejor reconocimiento que puede hacérsele a La Patria es valorar sus contenidos y suscribirse, es también una manera de cuidar la democracia. Gracias por la titánica labor periodística, pero sobre todo gracias por seguir siendo mi casa.