Luis Carlos Sarmiento Angulo, el hombre más rico del país, dueño de varias empresas y firmas de ingeniería, una de ellas era la encargada de construir el tramo Ruta del Sol 2 en compañía de Odebrecht y otra es la encargada de construir la doble calzada de la vía al Llano.
Para la construcción de la Ruta del Sol se asoció con Odebrecht, firma que está incursa en investigaciones en todo el continente americano por su gran capacidad de sobornar. Sarmiento manifiesta que en los casos de sobornos no tuvo nada que ver, porque él era un socio minoritario del proyecto, por lo que nunca fue consultado sobre estos malos procedimientos; afirmación que es muy difícil de creer.
Coviandes es la constructora del doctor Luis Carlos que tiene la concesión desde 1994 para la construcción de la doble calzada a Villavicencio. Una vía de escasos 90 kms. Sin lugar a dudas, la construcción de esta obra está durando un tiempo excesivo. Durante el proceso de la concesión se han presentado periódicamente derrumbes e interrupciones para el tránsito, generando grandes perjuicios a la comunidad del Llano y a Bogotá -lo que finalmente termina impactando a todo el país-.
Hace un poco más de un año un puente muy importante de la obra que estaba en construcción se cayó y ahora un derrumbe muy grande tiene suspendida la vía, lo delicado es que las vías alternas que existen son muy largas, están en regulares condiciones, los desplazamientos son lentos y con restricciones para vehículos de carga pesada.
Es lamentable la situación que está viviendo el Llano por no disponer de una buena vía con el centro del país. El Llano se considera la despensa de Bogotá. Es muy importante en el suministro de carne bovina y de cerdo, de arroz y de otros productos agrícolas e igualmente transita un alto número de carrotanques transportado etanol.
Villavicencio tiene una población cercana a los seiscientos mil habitantes y la mayoría de las ciudades de ese territorio en los últimos años han crecido enormemente. Las vías dentro del Llano son excelentes; es decir, están dadas todas las condiciones para el desarrollo y crecimiento de esta parte de Colombia. Lo único que le falta es que la comunicación entre Bogotá y Villavicencio logre algún día estar en las condiciones que se requieren.
En el último derrumbe que se presentó el señor Sarmiento le echa la culpa a un gallinero que hay en una parte de la vía. Sería muy importante para aclarar el asunto que el Ministerio del Transporte, junto con las autoridades que otorgan las licencias ambientales en el país se manifestaran al respecto. Sin embargo, no hay disculpa que explique que después de estar construyendo la vía por más de 15 años no se sepa cuándo se va a entregar.
Ante la ineficiencia del Estado para construir obras como esta, decidió entregarle su construcción a los particulares, mediante el sistema de concesión, con el fin hacerla más ágil y se solucionaran rápidamente las problemas que se llegaren a presentar. Lamentablemente en la vía al Llano esto no se dio.
Al parecer el negocio se volvió de centavos, una muestra fue el puente “Chirajara” que se cayó recientemente y que al parecer su colapso se debió a que el precio pactado con el constructor -contratado por Sarmiento- era excesivamente bajo, lo que trajo consigo unos diseños y una construcción precaria.
Siendo el Llano una región tan importante para el país, es urgente que las obras que se están realizando en esa carretera se terminen lo más rápidamente posible y que también se mejoren las condiciones de las vías alternas.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015