Cada dos años se realizan en Colombia debates electorales. Este año el turno lo será para el Congreso y Presidencia de la República; en dos años para corporaciones públicas territoriales (Asambleas y Concejos), juntas administradoras locales, gobernadores y alcaldes. Todos para períodos de 4 años.
El próximo domingo 13 de marzo se llevarán a cabo las elecciones más importantes de Colombia, como quiera que se trata nada más y nada menos que de la escogencia de los auténticos voceros o representantes del pueblo a nivel nacional: los congresistas (Senadores y Representantes a la Cámara), quienes, se supone, llevan un mandato claro que les entregan los ciudadanos, el que se halla establecido en nuestra Carta Política.
El articulo 113 de la Constitución señala que los miembros de los cuerpos colegiados representan al pueblo, quienes “deberán actuar consultando la justicia y el bien común”, so pena de ser “responsable políticamente ante la sociedad y frente a sus electores del cumplimiento de las obligaciones propias de su investidura”.
En algunas ocasiones he pregonado en estas mismas páginas, que quienes deseen prestar un servicio al Estado deberían recibir previamente formación académica certificada en asuntos públicos, puesto que de la extensa gama de candidatos que en esta oportunidad esperan el favor de los electores, da la impresión que muchos, o muchísimos, carecen de los conocimientos siquiera elementales de lo que es el Estado y la tarea que deberán cumplir, y por lo mismo, pueden resultar vulnerables en el trámite de las leyes.
Todos quisiéramos tener la mejor representación en el Congreso, que además de una dignidad, honestidad y responsabilidad a toda prueba, posean la formación suficiente para cumplir debidamente la importantísima misión que la Constitución les impone a senadores y representantes.
Aunque los vicios electorales que nos afectan resultan ser bien conocidos y de los cuales deben liberarse todas las elecciones; a lo que llama hoy esta columna es invitar a los aspirantes al Congreso a que se hagan un autoexamen sobre la formación que tienen en temas elementales, pero esenciales, de nuestra organización política, por lo que me atrevo a formular los siguientes interrogantes: ¿Nuestro sistema político se fundamenta en una ‘soberanía nacional’ o en una ‘soberanía popular’ y qué significa ello?; ¿Qué se entiende por la tridivisión del poder, quién fue su mentor, y si la misma reina en nuestro país?; ¿Cuáles son los fines esenciales del Estado?; ¿Qué papel juegan los órganos de control y cuál es su misión?; ¿Desde cuándo nuestro país está constituido como República unitaria?; ¿Conoce cuáles son los deberes constitucionales como persona y ciudadano?; ¿Sabe si los congresistas pueden ser reelegidos indefinidamente?; ¿Cuáles son los tipos de leyes que existen en Colombia y si tienen o no trámite similar?; ¿Cuál es el reglamento del Congreso de la República?; ¿Conoce a qué se refiere la ley 5ª de 1992?; ¿Conoce quién investiga disciplinaria y penalmente a los congresistas?; ¿Sabe si los congresistas tienen funciones judiciales?; ¿El Congreso debe autorizar al Presidente de la República para decretar los Estados de Excepción? ¿Cuáles son éstos?; ¿Cuáles son las causales de pérdida de investidura de un congresista? y ¿Sabe quién la tramita y decreta?; ¿Qué es un conflicto de intereses?; ¿Es el Congreso una institución desconcentrada? ¿Sabe en qué consiste la descentralización?; ¿Quién postula y elige a los magistrados de la Corte Constitucional?; ¿Cómo se designa el Defensor del Pueblo?; ¿Cómo se constituye el Consejo Nacional Electoral y quién elige al Registrador Nacional del Estado Civil?; ¿Sabe cómo es el trámite de una ley ordinaria?; ¿Qué significa sancionar las leyes?; ¿Qué asuntos se regulan por ley estatutaria?; ¿Conoce la ley que regula el presupuesto general de la nación?; ¿Cómo se reforma la Constitución? ¿Sabe si hay normas de la Constitución que no pueden ser modificadas?; ¿Solo el Congreso puede dictar actos con fuerza de ley?; ¿El Congreso de la República puede ejercer funciones administrativas o solo legislativas? ¿Ha tenido en sus manos la Constitución nacional? ¿Cuándo se desarrollan las sesiones ordinarias y extraordinarias del Congreso? ¿Conoce de la existencia de las comisiones constitucionales en Senado y Cámara? ¿Conoce las inhabilidades e incompatibilidades de los congresistas?
Esperemos que nuestros nuevos congresistas se interesen ahora sí, más que en mecánicas electorales para mantener un privilegio, en la inmensa responsabilidad que asumirán. En sus manos está el futuro del país; una excelente gestión y comportamiento le dará verdadero lustre a la institución democrática por excelencia, y que es lo que Colombia reclama.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015