VOZ DEL LECTOR

Panorama incierto y sombrío
Señor director:
Los abajo firmantes, periodistas independientes de Manizales, con amplia trayectoria en los medios de comunicación, nos hemos constituido en “Consejo de Redacción”, para ventilar, debatir y analizar los distintos problemas e inquietudes que aquejan a nuestra región, proponer sanos espacios de diálogo y conversación y contribuir en la búsqueda de soluciones.
Hoy vemos con mucha preocupación un cúmulo de situaciones que entorpecen el normal desarrollo de las actividades sociales, económicas y de convivencia ciudadana de nuestra amada Manizales, que deben motivar la inmediata atención de todos los estamentos de la comunidad (gremios de la producción, academia, empresarios, sociedad civil, fuerzas vivas, organizaciones de trabajadores, etc.), en el propósito de explorar salidas prontas y eficaces a la actual coyuntura.
No habíamos visto en la reciente historia de la ciudad un panorama más incierto y sombrío en materia de proyectos frustrados, ideados por la actual administración, por falta de rigor en su planeación, lo que ha llevado a una permanente improvisación y desacierto en los tiempos de ejecución , lo cual ha suscitado creciente malestar y desesperanza entre la ciudadanía.
Según la opinión de expertos, las obras proyectadas para este cuatrienio carecen de los suficientes y serios estudios técnicos, financieros y jurídicos, lo cual las pone en riesgo de futuras acciones legales (demandas), lo que podría comprometer la estabilidad económica del municipio.
A 32 meses del gobierno del alcalde Carlos Mario Marín, el balance no puede ser más desalentador, sombrío y pobre: obras a medio empezar, abandono de calles, vías arterias, parques, centros de recreación, andenes, red de acueducto y alcantarillado obsoleta. Hace un mes se decidió intervenir las avenidas, que presentaban deterioro de su carpeta asfáltica desde tiempo atrás en varios tramos, pero al hacerlo simultáneamente, se provocó un tremendo caos en la movilidad vehicular, agravando el ya existente e impactando negativamente el ritmo normal de la ciudad.
El centro histórico, otrora sitio obligado de los turistas, se ha degradado y lumpenizado de tal forma que se convirtió en un corredor de prostitución, microtráfico e inseguridad. La desbordada ocupación del espacio público por toda clase de ventorrillos no se controla, y más bien se tolera. Y de nuevo aparecen las invasiones en áreas periféricas, como las que se presentan en inmediaciones del barrio Samaria de la comuna norte, en donde hay asentamientos con cerca de 450 familias, lo que podría revivir los llamados “cinturones de miseria”, que tanto dolor ocasionaron en pasadas épocas aciagas. Allí no hay intervención de autoridad alguna.
No menos relevante es la alerta lanzada aquí por el entonces director del Dane Juan Daniel Oviedo, en el encuentro con Manizales Cómo Vamos, acerca de las elevadas tasas de pobreza, suicidios y envejecimiento de la población. Antes de la pandemia, Manizales reportaba 8 mil personas pobres y hoy esa cifra se ha elevado a 28 mil. Lo mismo ocurre con el fenómeno del suicidio, con uno de los índices más elevados del país. El funcionario advirtió que no ve acciones públicas para encarar estas problemáticas.
En menos de 3 años del actual gobierno se han producido más de 30 cambios en la nómina de funcionarios, entre secretarios y directores de entidades, algunos con motivaciones políticas, lo que refleja una nociva inestabilidad administrativa.
Preocupa la inercia, pasividad y cristiana resignación de un conglomerado que no reacciona ante el actual estado de cosas. Por eso, exhortamos a los diferentes actores sociales, políticos y gremiales a que despierten del marasmo en que se encuentran y asuman una actitud de defensa de los más caros intereses de ciudad. Recogemos así un vasto clamor ciudadano y en ningún momento estamos haciendo juicios de valor.
Dejamos constancia de la preocupación que nos asiste por los destinos de nuestra querida ciudad, vista desde afuera como un territorio emprendedor y pujante, y “el mayor desafío de una raza”, a decir del inolvidable escritor Álvaro Marín Ocampo.
Finalmente queremos decir que nuestro único compromiso es con el bien común.
Fabio Arias, Ari; José Fernando Garcés, Iván Darío Góez, Duván Marín Martínez, Rubén Darío Sánchez, Gildardo Ospina Ramírez, Yesid López López