"Una denominación de origen es tener un producto competitivo": experto en turismo

Una denominación de origen y el aprovechamiento de los factores que llevan al producto, como el proceso de fabricación o cultivo, son las dos mejores opciones de un país agrícola para promover el turismo.

Así resume el peruano Carlos Bustamante el potencial que tienen Colombia y el Eje Cafetero alrededor del grano. El consultor del Programa de Desarrollo Alternativo de la Agencia Interamericana de Desarrollo visitó Manizales durante Travesía 2013, evento organizado por la Universidad Católica de Manizales para celebrar el Día del Turismo, que se conmemoró el jueves pasado, y el aniversario de la institución educativa.

Bustamante resalta la importancia de llevar a la práctica las estrategias que se plantean en los procesos de investigación de turismo, lo cual se logra con un equipo de trabajo interdisciplinario. Para esto, dice, es indispensable tener proyectos a largo plazo, con financiación del Estado y con el aporte de las entidades interesadas en el tema.

El asesor, quien también es docente universitario de turismo, habló con NEGOCIOS sobre algunos pasos clave para una estrategia turística y cómo ha logrado el sector posicionarse en el tercer renglón de la economía peruana.

¿Cómo llevar las investigaciones académicas a la realidad, con el fin de comercializarlas y aportar a la economía?

La idea es que se orienten procesos de investigación que permitan llevar a operaciones estas estrategias de acción que están siendo propuestas y que permitan hacer buen uso, a través de certificaciones de la calidad. Esto implica tener buena infraestructura del Estado y la receptividad, mediante los hoteles, que deben ser de excelente factura. 

El fin es orientar la investigación para encontrar formas innovadoras y mejorar la calidad tanto en demanda como en oferta, sobre todo en la demanda.

Puedo ser un buen consultor, con nichos, pero si no hay estudios de mercado no sirve tanta experiencia. La investigación nos dice cómo segmentar, cuáles son los nichos de mercado y si hay aceptación de productos. Se necesitan de carácter cualitativo, con entrevistas con los empresarios y hacer una alianza estratégica con el Estado para que haya vías en buen estado y medios aéreos y fluviales de calidad.

¿Cómo poner un sello que diferencia al Eje Cafetero de las demás regiones?

En países europeos como Italia se desarrollan productos de origen a través de procesos de innovación  y de investigación, esto hace que las empresas se beneficien con la certificación de estos productos, lo que implica un componente adicional que les va a interesar a los inversionistas y a los empresarios. Es lo que pasa con la naranja rosa que solo está en Sicilia, y ahora los productores están asociados y exportan.
Comprar una denominación de origen o certificaciones como esta es tener un producto competitivo en el mercado y quién no lo quiere tener, pero esto no se hace mucho en Latinoamérica, donde la mayoría de productos no la tienen. 

¿Cómo tener éxito en un proceso de estos, si se está en una crisis como la de la caficultura?

En Perú tenemos un plaga que se llama la Rancha, que afecta el café, es como la broca. Esto implica tener centros de investigación y promoción agropecuaria, que permitan prevenir estas epidemias. Sin embargo, el café sigue siendo un producto competitivo, a pesar de ser conexo. Se puede manejar como producto de origen y no solo para el consumo, sino también a través de procesos de agroturismo o cafeturismo, como en Costa Rica.

Allá viven del café y de la caña y tienen centros o haciendas turísticas, donde brindan hospedaje, alimentación, hacen recorridos por el proceso. Solo por la entrada se pagan 50 dólares y ahí no termina todo, pues al final del recorrido hay una tienda de recuerdos y de dulces, con lo que el turista gasta entre 100 y 200 dólares. Esto sin contar el transporte.

¿Cómo convencer a los cultivadores de que el café sigue siendo competitivo, si se tienen que enfrentar a bajos precios?

A través de alianzas estratégicas entre empresarios y el Estado. Por ejemplo, en Perú el Estado ha subvencinado a los cafeteros para que puedan combatir la broca y para resarcir el balance económico, y luego con asistencia técnica y capacitación, porque si no es así ¿qué otros productos alternativos tengo? Me imagino que sustituir el café requiere de estudio de mercado previo, no es tan sencillo.

Ruta del café, competitiva

El turismo va en crecimiento en Perú ¿qué factores han facilitado este proceso?

El turismo allí es básicamente arqueológico y se ha convertido casi en la tercera fuente de generación de divisas en el país. Ha crecido la demanda y a la par la infraestructura turística, pues el Estado le está dando cierta prioridad, con el arreglo y ampliación de las carreteras, que no hacía antes. También ha crecido la oferta, sobre todo en las costas del norte, donde el mar no es tan frío. Allí empresarios invierten en hoteles resort, y por el sur, en casas de playa y complejos habitacionales. Poco a poco el turismo ha dejado de ser arqueológico y se están generando otras líneas de negocios.

¿Cree que es competitiva la ruta del café como se plantea en Caldas, donde las instituciones cafeteras serían el eje de esa propuesta?

Sí, es natural que la gente que los cultivadores migren a productos más rentables y encuentren opciones más rentables, pero el café no deja de ser atractivo. Lo que sí se debe hacer es fortalecerlo con otras líneas, que permitan verlo no como producto único, sino como un portafolio de productos y servicios alrededor del café. Es decir, no solo aprovechar el cultivo, sino que los caficultores tengan su finca con fines de hospedaje, de diversión, de alimentación, tal vez con  animales menores. Así se convierte en una cultura atractiva.

26,4% de los hogares hizo turismo*

Según un informe del DANE, entre abril del año pasado y marzo del 2013, el porcentaje de hogares que hicieron turismo en Colombia fue del 26,4%.
Bogotá, con 43,8%, fue la ciudad con mayor participación, mientras Montería se ubicó al final de la tabla con 1%.

Según informó Jorge Bustamante, director del DANE, el 4,2% de los hogares de las 13 ciudades encuestadas, es propietaria de una segunda vivienda destinada para recreación o descanso.

Las vacaciones siguen siendo el principal motivo a la hora de viajar, seguido por la visita a parientes o amigos y finalmente el turismo por trabajo o negocios, con 44,5%, 40,9% y 9,8%, respectivamente.

Al momento de viajar, 47% de los colombianos prefiere utilizar el transporte terrestre particular, el 43% el terrestre público y el transporte aéreo es utilizado por 9,1% de colombianos.

El 65% prefiere alojarse en viviendas de familiares o amigos, y 21% lo hace en hoteles y apartahoteles.

* Información de Colprensa.