Adriana Osorio
NEGOCIOS|LA PATRIA
En las familias colombianas solo hasta ahora se empieza a entender la importancia de enseñarles a los hijos a administrar el dinero propio.
Esta necesidad llevó a que cinco profesionales manizaleños se unieran para crear un grupo que promueve las finanzas personales sanas.
Así nació Poder del Tiempo y el Dinero (PTD). El grupo realizó hace tres semanas el primer seminario de finanzas personales en Manizales.
“Nuestro primer objetivo fue educarnos y educar", y tras 5 años de educarnos, estamos pasando a la segunda parte: educar. Nuestra misión es salud financiera para el desarrollo del potencial humano", dijo Jorge Alejandro García, médico y emprendedor integrante del grupo. Ellos dan consejos para aprender a manejar el dinero personal.
Es vital hablar con su pareja o con las personas con quienes comparte los gastos en casa sobre el dinero, sin tener miedos, tabúes o complejos. ¿Saben cuánto son sus ingresos? ¿Tienen una cifra exacta de cuánto cuesta sostener el hogar? O mejor aún ¿saben concretamente cuál es la participación de cada uno?
Si alguna vez ha ido a un banco a solicitar algún préstamo o algún producto financiero, lo más seguro es que sepa que no le piden sus calificaciones académicas, ni los títulos obtenidos, ni la hoja de vida. Piden los estados financieros.
La única salida y fuente de conocimientos para manejar mejor el dinero son la cantidad de ejemplos que hay alrededor y que en su mayoría reflejan la impulsividad por comprar, gastar más de lo que se gana, endeudarse y vivir apretado. Todos estamos a tiempo de declararle la guerra a estos malos hábitos para hacerlo, y la educación financiera mejora la calidad de vida. Un buen primer paso es leer libros sobre el tema y tener en cuenta que aprender es un proceso que requiere tiempo, disciplina y voluntad para identificar los hábitos en los que podemos mejorar y tomar la decisión de cambiarlos.
Es necesario llevar un control de los gastos. Lo que no se mide no se controla. El objetivo es tener al final del mes la mayor precisión sobre la cantidad que cada uno gasta para empezar a plantearse metas, evaluar el comportamiento financiero a corto, mediano y largo plazo, y lo más importante, sacar dinero para ahorrar e invertir.
Una herramienta clave para esto es planificar sus movimientos financieros. Esta es una manera de hacerlo: Tome el total de sus ingresos, y divídalo de la siguiente manera (porcentajes)
Por ejemplo, si los ingresos son de $1'000.000.
Vivienda (33%): $333.000
Transporte (12%): $120.000
Comida (15%):$150.000
Ahorros (5%): $50.000
Diversión (5%): $50.000
Pago de Deudas (5%): $50.000
Gastos Varios(4%): $40.000
Seguros (5%): $50.000
Salud (6%): $60.000
Educación(10%): $100.000
Con este simple ejercicio sabrá cuánto puede gastar al mes en cada aspecto (se pueden modificar de acuerdo con la realidad de cada uno), y si es necesario, identificar en que meses no podrá darse gustos, para desplazar dinero de un rubro a otro.
Si es de los que tiene deudas, y sobre todo, a intereses elevados; la primera meta debe ser cancelar estas obligaciones, pagarlas lo antes posible sin comprometer las necesidades básicas, y de ser necesario debe sacrificar una parte importante de los gustos. Si ya no tiene deuda, las posibles metas puede ser: un viaje , el capital inicial para un nuevo negocio, el anillo de compromiso, los estudios, entre otros, y asegurarse de que siempre tengan un rubro en la planeación mensual.
Nunca se sabe cuándo puede ocurrir una emergencia, o cuando se termine la fuente de ingreso principal que se tiene. Por esto, es recomendable ahorrar dinero cada vez que recibe su pago y lo reserve para situaciones de urgencia. Se aconseja tener en casa guardado lo correspondiente a 15 días de gastos totales, y en otros medios de ahorro tener los suficiente para vivir 6 meses sin trabajar.
Son aquellos préstamos que se utilizan para pagar cosas que realmente no se necesitan. Normalmente son bienes no duraderos que empiezan a perder valor en el momento que pasa la emoción inicial por haberlos comprado. Estos se deben comprar de contado. Si quiere viajar el próximo mes y no tiene el dinero, debió pensarlo mucho antes. Lo mismo funciona para ese celular que tanto desea, o para ese pantalón que le queda muy bien. Aunque es cierto que no se puede predecir que mañana le gustará un pantalón, si puede conocer sus hábitos de consumo y planificar un rubro para eso.
Son préstamos para adquirir cosas necesarias que no podemos pagar de contado. Estas “cosas” te generan un beneficio a corto y a largo plazo que puede ser monetario (retorno de la inversión) o intangible (para tu tranquilidad en el futuro). Si profundiza en este tema y desarrolla su inteligencia financiera se dará cuenta de que una deuda buena pondrá dinero en su bolsillo y no al contrario. Un ejemplo sencillo: Una persona tiene un buen historial financiero, pide un préstamo, compra un apartamento y lo arrienda.
La cultura del consumismo lleva a confundir los conceptos de riqueza y deuda. Los bancos, mientras tanto, empujan a la gente a caer en la trampa publicitaria de la inmediatez del consumo irracional y a creer que “tener más es ser más”.
Un activo es todo lo que pone dinero en su bolsillo, y un pasivo, es todo lo que lo saca de él. Su meta debe ser crear activos que generen ingresos pasivos. ¿Qué es un ingreso pasivo? Es el dinero que llega a su bolsillo y que no tenga que trabajar en que eso pase. Por ejemplo: el arriendo de un bien raíz; claramente su salario no es un ingreso pasivo, ya que si deja de trabajar este desaparece.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015