COLPRENSA | LAPATRIA | BOGOTÁ
Los colombianos utilizaron en 2016 cerca de $4,5 billones de sus cesantías acumuladas para los usos aprobados por la ley: vivienda, educación y seguro de desempleo. Esta cifra fue superior en el 15,9% a los retos del 2015.
De acuerdo con la Asociación Colombiana de Fondos de Pensiones y Cesantías, Asofondos, del total de cesantías retiradas por los trabajadores colombianos el año pasado, $1,6 billones, es decir 35,7%, se utilizó por terminación de contrato, lo que en la práctica significó que en este caso las cesantías operaron como protección para quienes se quedaron sin trabajo.
“Hemos dicho repetidamente que las cesantías son un gran aliado del trabajador. No solo se constituyen en ahorro, sino también en un mecanismo de protección en momentos de dificultad laboral, sobre todo coyunturas tan complejas como la actual, por eso el llamado hoy más que nunca es a ahorrar esas cesantías que les llegarán en las próximas semanas”, aseguró el presidente de Asofondos, Santiago Montenegro Trujillo.
Otras necesidades
El directivo, sin embargo, recordó que además de ser un colchón de seguridad para el trabajador cuando se termina su contrato laboral, la ley permite utilizar las cesantías para otro tipo de necesidades como la educación superior y la compra, liberación de deuda hipotecaria o mejoramiento de vivienda.
Para cubrir estos gastos, el monto de las censatías acumuladas que fueron retiradas el año pasado ascendió a $2,7 billones, 60% del total de los recursos utilizados con una variación de 14,5% con respecto a lo observado en 2015.
El 4,3% restante de retiros corresponde a otro tipo de retiros autorizados como las pignoraciones y embargos.
De acuerdo con Asofondos, los fondos privados de cesantías reportaron a diciembre pasado 6,9 millones de trabajadores afiliados, de los cuales 84% ganan menos de dos salarios mínimos.
“Los mayores beneficiarios de este ahorro siguen siendo aquellos trabajadores formales que tienen menores ingresos, lo que es positivo porque la prestación beneficia a una gran mayoría que necesita estar protegida con este ahorro”, aseguró Montenegro.
Las cesantías son una prestación económica que paga el empleador a cada uno de sus empleados formalizados y equivale a un salario completo por cada año laborado. Estos recursos deben abonarse cada año, a más tardar el 14 de febrero, a la cuenta individual de cesantías de sus trabajadores.
* Sólo en los fondos de cesantías los trabajadores tienen la opción de elegir cómo invertir sus recursos. El esquema Multiportafolios tiene dos tipos de portafolio: de corto y de largo plazo, cada uno con sus propias características de inversión, rentabilidad y tiempo de permanencia.
* La clave a la hora de elegir es saber el uso que se les dará a los recursos y por cuánto tiempo se mantendrán ahorrados.
* Por ejemplo, el portafolio de largo plazo se diseñó para los afiliados que quieren mantener sus cesantías por más de seis meses, en contraste con el de corto plazo que está diseñado para aquellos afiliados que las utilizarán en un periodo inferior.
* Es importante entender que a mayor tiempo se dejen las cesantías, mayores rendimientos obtendrán a largo tiempo.
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