Noticias de Manizales y Caldas,
Marzo 13 2025
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LA PATRIA|MANIZALES*
Al llamar a Miriam Lasso Monsalve solo se escuchaba algarabía al otro lado de la línea. Ella contestaba, pero no escuchaba nada, al lado alguien le hablaba. En otra llamada que se le hizo logró hablar más, dijo que estaba en Bogotá esperando la llegada de su hermano, el sargento César Augusto Lasso Monsalve, caldense que liberaron ayer junto a nueve uniformados más. “En Villavicencio está mi mamá y los hijos de César, nosotros lo esperamos acá”, contestó la señora en medio del ruido y dijo que colgaba porque no escuchaba.
En Cali estuvieron pendientes toda la tarde de la liberaciones, pero solo supieron lo que veían por televisión porque no se pudieron comunicar con los seres queridos que fueron a recibir al sargento. “Sé lo que vi en televisión, cómo le explico, sentí de todo cuando lo vi bajarse del helicóptero. Es una alegría inmensa”, dijo Liliana Monsalve, prima del liberado. Agregó: “No me han llamado, solo sé lo que vi por televisión y eso que ahora (8:30 de la noche) no sé nada porque se fue la luz y no tenemos televisión”.
A las 9:00 de la noche el sargento ya se había reencontrado con su familia. “Está muy agotado lógicamente porque son muchos cambios en poco tiempo, pero lo vemos bien, contento, y nosotros estamos felices”, dijo Miriam, esta vez más calmada que en la tarde.
Así terminaron cerca de 14 años de secuestro para Lasso Monsalve, a quien las Farc se llevaron el primero de noviembre de 1998 durante la toma a la estación de Policía de Mitú (Vaupés). En los hechos murieron 23 hombres de la Fuerza Pública y 61 más fueron secuestrados, pero a 54 los liberaron un tiempo después.
"La felicidad no me cabe en el pecho, estoy feliz, feliz... Y yo sé que el país entero también" fueron las primeras palabras de doña Fabiola Monsalve, al tener a su hijo el sargento de la Policía César Augusto Lasso en sus brazos después de 13 años, cinco meses y un día de secuestro.
Y agregó con una sonrisa queriendo dejar el pasado atrás: "Está mejor que todos nosotros, está espectacular y nos quiere mucho".
Las primeras impresiones de Lasso dejaron ver su infinita felicidad. El reencuentro con su madre y sus hijos estuvo lleno de emotividad. Hubo lágrimas, agradecimientos a Dios y sorpresa al reconocer a sus hijos Lizeth, Jenifer, Daniel y Mónica, a quien veía por primera vez.
"Saludos a toda la gente en Risaralda, a mi pueblo de Santa Rosa y a Manizales. Muchas gracias a los medios que estuvieron atentos a ayudar a mi familia. Voy a que me evalúen médicamente, creo estar muy bien, ahora hay que seguir para adelante y hacer muchas cosas, me siento muy orgulloso de ser policía y de servir a mi institución", dijo el sargento sin soltar las manos de su señora madre, que lo acompañaba en su traslado a la clínica de la Policía en Bogotá.
Durante los primeros seis años, doña Fabiola Monsalve y don Daniel Lasso, el padre, quien murió el primero de junio de 2009 esperando a su hijo, no tuvieron noticias de él, pero luego de la primera carta de supervivencia estuvieron comunicándose en varias oportunidades, hasta que en septiembre de ese mismo año no volvieron a saber nada, pues la guerrilla lo incomunicó nuevamente, pero en una de las líneas que escribió en su ultima carta le decía a su madre: "mamá, tengo unos deseos inmensos de salir de aquí".
Y ayer fue ese gran día. Lasso estrechó los brazos de doña Fabiola, quien estuvo muy atenta esperándolo en el aeropuerto de Villavicencio, pero en medio de tanta alegría sintió la ausencia de su padre, quien partió a la eternidad sin volver a ver a su amado hijo 'Cesitar, como le decía.
La subdirectora médica de complejo hospitalario, coronel Clara Galvis, informó que los uniformados que llegaron al Hospital serán supervisados bajo un “protocolo para liberados” en el que se le realizarán exámenes especializados para descartar cualquier complicación de salud.
"Habrá apoyo del grupo médico, aquí van a estar una semana", dijo la coronel Galvis.
Los sargentos Luis Arturo Arcia, Robinson Salcedo, Luis Alfonso Beltrán Franco y sargento Luis Alfredo Moreno, que duraron más de 10 años en la selva colombiana en poder de las Farc, fueron recibidos por personal militar en el Hospital hacia las 8:00 de la noche del lunes.
"Ellos inician al protocolo de evaluación y desde el primer momento que ingresan tienen un equipo médico y personal d psiquiatría. A medida que se vaya haciendo la evaluación médica vamos ingresando con otro tipo de apoyo", señaló Galvis.
La Coronel informó que a la 11:00 de la mañana el Hospital Militar entregará el primer parte médico de los cuatro suboficiales.
A eso de las 5:45 de la tarde vieron aterrizar el helicóptero, allí aguardaron unos minutos sentados, mientras les daban la orden para bajar, pero no perdieron tiempo y a lo lejos saludaban. El primero en descender fue el sargento del Ejército Luis Alfonso Beltrán, y poco a poco descendían y caminaban por la pista acompañados de médicos.
César Augusto Lasso nació en Manizales en 1967 y vivió entre la capital caldense y Chinchiná hasta los ocho años, luego se trasladaron a Santa Rosa de Cabal (Risaralda) y fue allí donde pasó toda su adolescencia, hasta que el 18 de junio de 1988 se vinculó a la Policía. De los casi 24 años que lleva en la institución estuvo 13 años secuestrado.
"Veo a mis hijos lindos, están muy hermosos y sé que toda mi familia está muy bien y eso me pone más feliz", puntualizó al llegar el sargento César Augusto Lasso.
Un gobernador, un exministro de Defensa, 11 diputados y 14 militares y policías murieron, desde 2003, siendo rehenes de las Farc.
27 rehenes no tuvieron la suerte de regresar a la libertad, pues perdieron la vida, en la mayoría de los casos ejecutados y de éstos casi todos en represalia por reales o supuestas operaciones de rescate de las fuerzas de seguridad.
"Si los señores de las Farc asumieran posturas más humanas y consideradas habrían podido evitar la muerte de esos secuestrados", dijo en declaraciones a Efe la congresista Consuelo González, antigua rehén del grupo guerrillero.
La legisladora tuvo la suerte de ser liberada por decisión unilateral de la guerrilla en 2008, tras seis años de secuestro.
"Los que han muerto son ángeles que cuidan de los otros secuestrados y los desaparecidos", dijo a Efe la adolescente Natalia Duarte, hija de Carlos José Duarte, intendente jefe de la Policía, que fue liberado ayer.
El de Natalia es el caso contrario al de Vladimiro Bayona, de 67 años y padre de Alexander Vladimir Bayona, universitario al que las Farc secuestraron en 2000 en Cauca junto a su compañero de estudios Alberto González.
"Espero que mi hijo venga a sepultarme y que no sea yo quien lo entierre en vida", dijo Bayona, quien no acepta que el caso de Vladimir y Alberto, cuya suerte es un enigma, haya caído hasta en el olvido judicial.
En total fueron cinco los caldenses que estuvieron en la lista de canjeables de las Farc, cuatro recuperaron la libertad y uno murió en cautiverio. A esta lista, se suma la de otro Policía que lleva ocho años secuestrado, pero fue por el Eln.
* Óscar Tulio Lizcano. Secuestrado el 5 de agosto de 2000 en la vereda Getsemani, jurisdicción del corregimiento de San Lorenzo (Riosucio). El responsable del plagio es el frente Aurelio Rodríguez de las Farc. Lo liberaron ayer.
* Sargento del Ejército José Ricardo Marulanda Valencia, secuestrado el 4 de marzo de 1998, en una toma guerrillera en el corregimiento de El Billar, en San Vicente del Caguán, antigua zona de distensión. Oriundo de Chinchiná. Lo liberaron el 2 de julio del 2008.
* Sargento del Ejército Erasmo Romero Rodríguez, secuestrado en la toma guerrillera del 3 de agosto de l998, en Miraflores (Guaviare). Oriundo de Risaralda (Caldas). Lo liberaron el 2 de julio del 2008.
* César Augusto Lasso Monsalve, de 41 años. El sargento nació en Manizales en 1967. Secuestrado en 1998, en la toma de Mitú, lo secuestraron las Farc.
* Nacianceno Orozco. Exdiputado del Valle. Secuestrado en el 2002 por las Farc. Asesinado en Cautiverio.
* Agente Alexánder Herrera Hurtado. Secuestrado el 17 de junio del 2000, en Chinácota (Norte de Santander). Desde entonces nada se sabe de su paradero. Dicen que lo secuestró el Eln.
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