Renuncia del procurador se atravesó al debate de licores

COLPRENSA | LA PATRIA | BOGOTÁ

Aunque en el primer punto del orden del día de la plenaria del Senado figuraba el proyecto sobre el régimen del monopolio rentístico y el impuesto al consumo de licores, lo que se discutió ayer fue si votar o no la renuncia del procurador General de la Nación, Alejandro Ordóñez.

El debate se dio porque el procurador, pese a que el Consejo de Estado determinó que fue nula su elección, seguía siendo procurador. La sentencia no le había sido notificada al alto funcionario y por ello él pasó su carta de renuncia ante el Senado.

Para unos, dado que se dio la decisión del Consejo, no se debería aceptar la renuncia, mientras que para otros como el Centro Democrático y la senadora liberal Viviane Morales, sí se debería votar la renuncia.

El debate no se había anunciado en la agenda y solo hasta el inicio de la sesión se incluyó, especialmente por el uribismo.

Lo curioso es que se debatió si votar o no por un tiempo, luego el presidente del Senado, Mauricio Lizcano, decidió que por las implicaciones jurídicas del caso lo mejor era aplazar la votación y seguir con el debate sobre el proyecto de los licores; pero después decidió volver a la discusión de la renuncia e incluso se alcanzó a iniciar la votación, pero sin quórum decisorio se tuvo que levantar la sesión.

Al final de la tarde se conoció que el falló que anuló la reelección de Ordóñez quedó en firme. La Sala Plena del Consejo de Estado negó las dos solicitudes de aclaración y nulidad que fueron presentadas contra el fallo.