COLPRENSA |LAPATRIA | BUENAVENTURA
El ministro del Interior, Guillermo Rivera, aclaró que los diálogos con el Comité Ejecutivo del Paro Cívico de Buenaventura no ha sido suspendido.
“El diálogo continúa, los voceros del Comité del Paro Cívico han pedido un espacio autónomo para reunirse una hora y analizar lo que hemos avanzado, pero tenemos el compromiso de seguir trabajando hoy hasta altas horas de la noche y seguramente mañana hasta lograr una fórmula que nos permita un acuerdo”, dijo el ministro del Interior.
Todo se dio por los posibles abusos del Esmad de la Policía a los habitantes del barrio Isla de La Paz en Buenaventura.
“Hemos enviado una comisión de verificación. Se ha ido una funcionaria de la dirección de derechos humanos del ministerio del interior para verificar los hechos que han sido expresados en la mesa. Pero eso no significa un levantamiento de la mesa de negociación. Nadie se ha levantado de la mesa”, continuó Guillermo Rivera.
Fuera la Sijín
El padre Jhon Reina, director de la Pastoral de Buenaventura, dijo que es posible que algunos jóvenes se hayan extralimitado, pero con pedagogía se pueden corregir. “hay que llamarlos al orden”, expresó.
Pese a ello insistió que no es cierto que el paro se haya salido de control.
La cifra de tractomulas quemadas subió a cuatro y la de camiones averiados también a cuatro.
Asociaciones como Fedetranscarga y Colfecar expresaron temor por lo que pueda pasar con los más de mil vehículos que están en las diferentes zonas de parqueo de la ciudad, la mayoría cerca a la vía alterna-interna.
Camioneros independientes de Palmira y Buga manifestaron su solidaridad y dijeron que no moverán más sus carros hasta tanto haya una solución al paro.
EL padre Reina pidió que la Sijín de la Policía se retire de las calles internas de los barrios intimidando a la comunidad y haciéndose pasar por representantes de los derechos humanos. “No estamos diciendo que no dialogamos, pero queremos que se cumplan esos puntos para volver a sentarnos a la mesa”, expresó el padre.
De otro lado, doce menores resultaron afectados por gases lacrimógenos. De acuerdo con el reporte de la Clinica Santa Sofía, ingresaron 16 pacientes afectados por la inhalación de gases lacrimógenos. “De esa cifra, 12 son menores afectados y cuatro adultos”, explicó Daniel Parra, director administrativo del centro asistencial.
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