JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
¿Qué tanto ha crecido la población y qué tantos nacimientos hay en el país?
Aunque las cifras del DANE evidencian que hoy en Colombia hay unos 48 millones 258 mil colombianos, de ellos un 51,2% hombres y un 48,8 mujeres, los resultados también evidencian que la mayoría de personas, por lo menos el 68%, están en el rango entre los 15 y 65 años de edad.
Con ello los reportes del DANE demuestran que la población también se está envejeciendo, en especial en el Eje Cafetero.
Este hecho se confirmó en su último informe de Estadísticas Vitales que hizo el Departamento Nacional de Estadísticas, donde se reportó un descenso gradual en el número de nacimientos en Colombia, principalmente en Caldas, que tiene el índice más bajo del país.
De acuerdo con el registro anual entre el 2015 y el 2021, en Colombia pasó de 660 mil 999 nacimientos en el 2015 a 612 mil 228 este año (ver gráfico), lo que muestra un bajonazo de 48 mil 771 nacimientos, un descenso del 7,4% y unas reducciones anuales del 1,3%.
Solo comparando el 2021 y con el 2020 el registro muestra 17 mil 174 bebés menos, una caía del 2,7%. Este año, la situación ha sido igual. Según el informe en el segundo trimestre de este año hubo un descenso de 7 mil 776 nacimientos, igual a una caída del 5,2%.
En el caso de Caldas, se reportó la la tasa bruta de natalidad más baja con una tasa de 7,7 nacimientos por cada 1.000 habitantes, seguida por Bogotá, Quindío, Cundinamarca, Nariño, Boyacá, Valle del Cauca, Risaralda y Antioquia.
Para algunos expertos, el hecho tiene que que ver con dos caras de la moneda que hoy se viven en el país. Por un lado advierte sobre el envejecimiento de la población en Caldas y Manizales, ante una menor recomposición familiar, debido a la migración de jóvenes y niños a otras ciudades.
Así mismo muestra mayor desinterés de tener hijos, porque las mujeres, en la medida en que son más educadas y están más involucradas al mercado laboral, postergaron esa decisión de de fecundidad, ya que su interés prioritario es formarse y no quedarse solo como amas de casa.
Aunque las cifras del DANE muestran una reducción las las tasas de natalidad, y la decisión de muchas parejas jóvenes de no tener hijos, en contraste se evidencia que el mayor número de nacimientos se presentó en madres con edades.
También hubo un incremento en niñas menores de edad, de 14 años, y padres entre los 14 y 19 años. En este rango de edades aumentaron los embarazos, pasando de 496 en el 2020 a 600 en el 2021.
Así mismo creció el rango de padres de 20 años y más con madres de 14, pasando de 390 en el 2020 a un total de 433 en el 2021.
Sin embargo, en lo corrido de este año se tuvo un leve descenso, al pasar de 561 madres menores de 14 años en el segundo semestre del 2021 a 552 en el mismo lapso del 2022, un descenso del 1,6%.
Se estima que esta situación será más evidente hacia el 2035, donde se prevé que la pirámide ideal de población de menos adultos y más jóvenes en su base, se modificará, con menos jóvenes y más adultos mayores.
Hoy en Caldas, la mayoría de hombres (3,7%) y de mujeres (3,8%) se concentran en los grupos de 25 y 29 años, pero para el 2035 se proyecta que la mayoría de hombres y de mujeres se concentren en grupos entre 40 y 44 años de edad. En el caso de Manizales, la participación será similar.
Aunque en general en el país se vienen reportando decrecimiento en las tasas de fecundidad, en el segundo semestre del 2021 comparado con el 2022 las cifras de nacimientos tuvieron un repunte del 5,4%, al pasar de 141 mil 454 nacimientos a 149 mil 54. Según expertos parte de esta tendencia se debió al efecto de la pandemia que conllevó a que las familias estuvieran más unidas y hubiera más espacio en el hogar, hecho que pudo disparar el crecimiento elevado de estas tasas de fecundidad.
El sicólogo y magíster en educación y especialista en sicología clínica con énfasis en niños y adolescentes y docente de planta de la Universidad de Manizales, José Fernando Veléz Trejos,
explicó que parte del efecto de la menor natalidad en Colombia ha tenido que ver con el concepto y el discurso de muchos jóvenes en el sentido de "para qué traer hijos a sufrir a este mundo".
A eso se suma su interés de proteger el planeta y el hecho de ser más conscientes de que los recursos naturales son finitos. La parte social y económica también pesa, ya que muchos piensan en la inseguridad y el riesgo que hoy implica tener un hijo, unido al problema de conseguir trabajo, y las dificultades de sostener uno o varios hijos.
También destacó el hecho que hoy en días las relaciones son menos formales, pues algunos insisten en que los "hijos amarran" o "se convierten en un gasto".
A muchos, les gustan unas relaciones abiertas, sin ningún compromiso, por lo que hoy se habla de "amigobios o de relaciones gaseosas", en las que el encuentro encuentro fortuito o casual conduce más a lo sexual y a la diversión que a los sentimental. Las tendencias sexuales, el homsexualismo y bisexualismo, también conllevan a que haya menos interés de tener hijos.
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