El jefe de seguridad del expresidente Álvaro Uribe, coronel de la Policía Eduardo Ramírez , negó ser el oficial al cual el ministro de Vivienda, Germán Vargas, hizo alusión cuando aseguró que la investigación preliminar que le adelanta la Procuraduría por sus presuntos nexos con paramilitares obedece a un complot liderado por Santiago Uribe, hermano del exmandatario.
A través de un comunicado, el coronel Ramírez señaló que desde el 7 de agosto de 2010 cuando fue asignado por la Policía para coordinar la seguridad del expresidente, ni él ni "su hermano Santiago Uribe, o cualquier otro miembro de su familia, me han solicitado, exigido o siquiera sugerido averiguación o actividad en contra de persona alguna".
También aseguró que su apellido es bastante común en el país. "¿Será posible que de existir un coronel de la Policía Nacional, en servicio activo, plenamente identificable y ubicable, haciendo parte de un %¬complot%¬ contra un ministro de Estado en ejercicio, no cualquier ministro, éste no hubiera exigido de manera inmediata a la Policía Nacional su intervención para confrontar al oficial y esclarecer su participación en un acto tan delicado?
El coronel Ramírez afirmó que en razón a su cargo no está habilitado para "adelantar investigaciones, solicitar o practicar pruebas, manejar o proteger testigos, recolectar testimonios, etc? ya sea por iniciativa propia o bajo dirección de autoridad judicial o disciplinaria alguna".
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