
COLPRENSA | LA PATRIA | BOGOTÁ
La Comisión Primera de la Cámara no presentó ayer ponencia al proyecto debido a las dudas de distintos parlamentarios con respecto a la iniciativa, pero los legisladores decidieron, por la urgencia del proyecto, citar para hoy.
El Congreso de la República está a punto de terminar este periodo de sesiones ordinarias sin que el proyecto de ley que aumenta las penas para conductores borrachos, se convierta en ley.
Se esperaba que ayer las Comisiones Primeras Conjuntas discutieran el proyecto de ley, pero los legisladores se concentraron en discutir por qué las contravenciones de tránsito no pueden terminar sancionadas con cárcel.
Sumado a esto, la Comisión Primera de la Cámara no presentó ponencia al proyecto, debido a las dudas de distintos congresistas con respecto a la iniciativa. Según el senador Juan Manuel Galán, presidente de la Comisión Primera, “la Cámara no ha firmado la ponencia del proyecto, eso indica que ellos no están de acuerdo con la iniciativa y me parece que eso hay que tenerlo en cuenta”.
Y agregó que el propósito del proyecto es fundamental para el país, pero hay que darle un buen mensaje a la sociedad. “Para que seamos capaces de resolver los problemas de los conductores ebrios tomándonos el tiempo para analizar a fondo qué es lo que se necesita en esta materia”.
Riesgos
Debido a esas dudas, las Comisiones nombraron a los ponentes del proyecto: la caldense Adriana Franco, Roosvelt Rodríguez, Jesús Ignacio García y Luis Fernando Velasco, para que integren una subcomisión que depurará el proyecto y posiblemente presentará una ponencia unificada.
Cabe recordar que el pasado lunes el presidente del Congreso, Juan Fernando Cristo, advirtió a las Comisiones Primeras que de no aprobarse ayer la iniciativa, esta podría hundirse. Sostuvo que se estarían contemplando sesiones extraordinarias para evacuar los proyectos pendientes.
Según la ponente en la Cámara de Representantes, Adriana Franco, esta iniciativa no puede limitar los derechos constitucionales de los ciudadanos. "Este proyecto toca temas que necesitan un estudio muy juicioso, los congresistas tenemos que aumentar las penas, pero hay parámetros en modificación de las conductas de tránsito como temerarias que ameritan una mayor discusión”, argumentó Franco.
Así mismo, sostuvo que el Congreso no puede actuar de manera mediática. “Nos dicen que se va a encarcelar a los conductores que manejen borrachos, pero pregunto en dónde, si hoy no hay siquiera cárceles, cuál es la disponibilidad de los entes carcelarios”.
Por otro lado, el otro ponente de Cámara, Roosvelt Rodríguez, sostuvo que el Congreso sí está interesado en reducir el impacto de la conducción temeraria, pero que el proyecto no está estructurado desde el punto de vista técnico. "Ha sido apresurada la presentación de esta iniciativa porque se percibe que no hay un estudio de fondo que permita presentar un proyecto que solucione de manera efectiva este problema”.
Palo para el Senado
El senador Luis Fernando Velasco dijo que la discusión se basó en artículos que no estaban presentes en la ponencia. “Hago un llamado porque no podemos venir a discutir asuntos que no están contemplados. Hay senadores, no todos, que llegan a discutir sin siquiera haberse leído las ponencias. Estaban debatiendo unos artículos que ni siquiera estaban en el proyecto”.
De igual forma, puntualizó que en una propuesta de la Consejería de Seguridad de la Presidencia, el efecto es crear un tipo penal de conducción temeraria o terminar las acciones de conducción temeraria con cárcel. "Eso lo habíamos retirado y eso fue lo que más se discutió en el debate”.
El legislador dijo que para la discusión de la iniciativa habría que volver al espíritu original que buscaba subir las penas mínimas en lesiones culposas y en homicidio culposo para evitar el espectáculo del borracho irresponsable que pasa la borrachera después de matar a dos personas y un juez lo manda para la casa.
No puede ser el argumento
El viceministro de Justicia, Miguel Samper, dijo que comparte la intención de este proyecto de ley que es aumentar las penas a los conductores borrachos, así mismo respondió que el argumento para que se sancione a los conductores ebrios no puede ser que las cárceles están llenas. “Con el proyecto de ley de Código Penitenciario esperamos solucionar ese problema”.
El vicefiscal Jorge Fernando Perdomo afirmó que la institución apoya la iniciativa y comparte el sentido de la misma, de igual forma apoyó el traslado de los artículos contemplados.
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