En Chocó cesan las actividades, menos la violencia

LA PATRIA | MANIZALES *

Chocó es una región selvática, ubicado en la costa pacífica, en la que operan diversos grupos armados ilegales y, según denuncias de habitantes de la zona, el Eln y las bandas criminales están ocupando los espacios dejados por las Farc tras la firma del acuerdo de paz con el Gobierno.

Sumado a la violencia que soportan sus habitantes hay una insatisfacción en la población con las necesidades básicas razón por la que mañana en el departamento se iniciará un nuevo paro cívico. La gente saldrá de nuevo a las calles. El año pasado la movilización duró una semana, del 17 al 24 de agosto, pero los líderes creen que esta vez la jornada será más larga.

Ayer el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, anunció el envío de 500 militares adicionales al Chocó para reforzar la seguridad en esa región del oeste del país donde se han recrudecido las acciones de grupos armados ilegales.

Villegas, que presidió un consejo de seguridad en la localidad de Nóvita, donde el domingo fueron secuestradas ocho personas, dijo que los 500 militares reforzarán a los 6 mil 300 soldados que están en ese departamento.

El titular de Defensa agregó que a la Policía que tiene hoy 1.900 efectivos en el Chocó, se sumarán 28 miembros del Gaula, la unidad especializada en la lucha contra el secuestro y la extorsión, y 30 carabineros más de manera permanente.

El ministro viajó ayer a Nóvita tras la denuncia de que la guerrilla del Eln secuestró a siete hombres y una mujer en esa localidad.

Además, en el municipio de Acandí, también del Chocó, fue asesinado el domingo el policía Jefferson Saavedra Pabón y un compañero suyo fue herido, al parecer en un ataque de la banda criminal Clan del Golfo. Ayer la Policía confirmó el asesinato del patrullero Jackson Mosquera, cuando prestaba su servicio en el corregimiento de Pie de Pepe, en el Medio Baudó, víctima de un francotirador.

Villegas dijo que las Fuerzas Militares harán patrullajes de control no solo en Quibdó, capital del Chocó, sino en los más importantes municipios ribereños del Pacífico.

"Vamos a desplazar un helicóptero arpía que ya está en operación para localizar a los ocho secuestrados, y va a permanecer durante varios meses al servicio del Chocó", añadió el ministro.

Dijo también que la Armada Colombiana apoyará la operación de seguridad con seis botes y tres barcos.

El ministro agregó que desde la noche del domingo las autoridades trabajan para poner en libertad a los secuestrados que, según algunas versiones, se dedican a actividades ilegales.

"Hay distintas versiones que no nos interesan para efectos de ponerlos en libertad, y ya será la Fiscalía la que decida si tenían algún comportamiento reprochable o no", afirmó Villegas.

Frenan

La motivación principal del paro cívico es el incumplimiento del pacto de gobernanza que firmaron los chocoanos con el Gobierno Nacional el año pasado.

No se han terminado las vías que comunican al departamento con Pereira y con Medellín, no hay avances para poner en funcionamiento un hospital de tercer nivel, ni los tres de segundo nivel contemplados en el pacto, y tampoco se ha publicado el mapa sobre el informe de deslinde del diferendo limítrofe entre Antioquia y Chocó por Belén de Bajirá.

El nuevo pliego, muy similar al del año pasado, está dividido en 10 puntos, y por cada uno esperan contar en mesas de trabajo con delegados del Gobierno. Lo líderes coinciden en que todas las manifestaciones serán pacíficas y silenciosas.

Según Roberto Gutiérrez González, líder de la mesa de trabajo de servicios públicos, esta vez presentarán 10 peticiones, muy parecidas a las del año pasado, y lo harán de forma pacífica y respetuosa.

“El incumplimiento de los acuerdos firmados con el Gobierno es del 95 %. Queremos que se trace una ruta clara para el cumplimiento de esos acuerdos. Varias mesas de trabajo ni se instalaron y queremos que queden con financiación clara para que puedan operar”.

Gutiérrez añadió que es importante establecer una ruta clara con la empresa de energía, Dispac, para mejore su calidad en el servicio, reduzca tarifas y establezca tarifas diferenciales para zonas de difícil acceso.

Otras motivaciones del paro cívico están relacionas con la necesidad de recursos para garantizar agua potable a los municipios del departamento y la exigencia de mayor control y atención a la crisis humanitaria en las regiones rurales que hoy son víctimas de desplazamiento ante el enfrentamiento entre grupos ilegales por copar los territorios dejados por las Farc.

El selvático y lluvioso departamento del Chocó ha sido por el abandono estatal caldo de cultivo para la corrupción, inseguridad, minería ilegal, narcotráfico, desplazamiento forzado, presencia de grupos al margen de la ley y narcotraficantes.