COLPRENSA | LA PATRIA
La reforma tributaria aprobada ayer por el Congreso de la República modifica algunos aspectos del Estatuto Tributario vigente desde 2010, en especial los impuestos de renta y complementarios, ventas, timbre y retención en la fuente.
Con base en lo dicho por el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, Colprensa explica los principales aspectos de la nueva normatividad, que comienza a regir el primero de enero.
La reforma tiene cinco grandes capítulos: impuesto a las personas naturales, impuesto a las sociedades, reforma del IVA, ganancias ocasionales y normas antievasión y antielusión.
Impuesto a personas naturales
El propósito es que quienes ganen más paguen mayores impuestos, y viceversa. Se crea el Impuesto Mínimo Alternativo Nacional (Imán). “No estamos cobrando ese impuesto de manera progresiva, la idea es que quien tiene ingreso bajo no pague impuesto de renta”, puntualizó el ministro. El nuevo gravamen, según el ministro, se explica porque “Colombia es el tercer país más desigual del continente, después de Haití y Guatemala”.
El nuevo impuesto regirá para quienes ganen más de $3,6 millones al mes, “de ahí hacia abajo se elimina por completo la tributación”. Explicar que el 80 % de los colombianos gana menos de un millón de pesos, y quienes ganan hasta $2 millones o $3 millones “tendrán un alivio de unos 130 mil anuales”.
Para ingresos de $5 millones (que obtienen en promedio cuatro millones y medio de personas) la tarifa es 1 % ($200 mil anuales); entre 6 y 8 millones, $340 mil anuales; $10 millones, $160 mil anuales, y en adelante la tarifa aumenta al 20 %.
“El impuesto de renta solo afecta al 0.6 % de los colombianos, o sea 130 mil personas que ganan más de $8 millones”, dice Cárdenas. El Gobierno considera que de la población económicamente activa solo 4,6 millones pagan el impuesto a la renta y solo 1,1 millones declaran renta.
Impuesto a las sociedades
Actualmente el impuesto de renta es del 33 %. En adelante será de 25 %, pero se crea un nuevo gravamen: 9 % sobre las ganancias a través del Contribución Empresarial para la Equidad (Cree). La idea de este impuesto es compensar en parte la rebaja en los impuestos a la nómina, es decir, los parafiscales, que desaparecieron y financiaban el Sena, ICBF y salud.
Este cambio busca aliviar la carga sobre la nómina y estimular la creación de más puestos de trabajo.
El ICBF y el Sena tendrían otras fuentes de financiamiento, cambiando el antiguo sistema por un impuesto de destinación específica. “Lo que hay que reponerle al sector no es la totalidad del monto, sino de quienes ganan menos de 10 salarios mínimos. Por ejemplo, para salud habría que reponer 4,8 puntos y se aportarán 5,3. Estas entidades tendrán siempre un piso para asegurar sus recursos”, explicó el jefe de cartera.
Cifras oficiales indican que dos de cada tres trabajadores tienen una ocupación informal, no tienen un jefe que les pague aportes a seguridad, salud o pensiones y están a la deriva en materia de beneficios como primas, cesantías o vacaciones.
A los que sí cotizan se les distribuye de la siguiente manera: 12 puntos para pensiones, 8,5 para salud, 4 puntos para cajas de compensación, 3 para ICBF y 2 para el Sena. Con el nuevo Estatuto Tributario el Cree queda distribuido así: 40 % para educación, 30 % para financiar el sector salud y 30 % para impulsar el desarrollo rural.
Reforma del IVA
Actualmente se manejan siete tarifas: 0 %, 1,6 %, 10 %, 16 %, 20 %, 25 % y 35 %. Para simplificarlo, se reduce a tres tarifas: 0 %, 5 % y 16 %. Sin embargo, los IVA más altos, del 20 %, 25 % y 35 % se aplicarían, pero únicamente a los bienes de lujo, como los vehículos que cuestan más de $30 mil dólares.
Con la reforma, entre otras cosas, los insumos de cadenas productivas agropecuarias pasan del 16 % al 5 %, lo que beneficia a cinco millones de personas. También se reduce este impuesto a la medicina prepagada. Los productos de la canasta familiar quedaron exentos.
Los restaurantes tendrán una categoría especial del 8 % cuando vendan más de $110 millones mensuales. Esta medida se toma para formalizar estos negocios y, según los expertos, a pesar de que el Gobierno asegura que el corrientazo no se verá afectado, las cuentas indican lo contrario.
“Esperamos que los restaurantes se formalicen, tengan acceso a crédito, tecnología y capacitación por medio de un impuesto al consumo reducido, más manejable”, dijo Cárdenas.
Ganancias ocasionales
Para estimular el pago de los impuestos se reduce el pago por ganancia ocasional por la venta de activos tenidos por más de dos años, como es el caso de las viviendas. La tarifa pasa del 33 % al 15 % para le venta de sociedades, y al 10 % para la venta de activos.
Normas antievasión y antielusión
Mediante un conjunto de normas se evitará que existan figuras a través de las cuales las empresas tengan tratamientos más favorables que otras y, a su vez, buscan promover la cultura del pago de los tributos. En este capítulo se destinó un espacio a la discusión de las normas sobre paraísos fiscales, ya que muchas compañías se han visto beneficiadas de la poca normatividad en esta materia. La tarifa será del 25 %, y en enero próximo el Gobierno revelará la lista de países que quedarán gravados con este tributo.
Así mismo, habrá lupa para fundaciones sin ánimo de lucro que no se dediquen a su objeto social, y a universidades privadas que no rinden cuentas.
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