COLPRENSA | LA PATRIA | BOGOTÁ
Atemorizados. Así se encuentran los habitantes de la Costa Caribe por cuenta de tres ataques terroristas registrados durante el pasado fin de semana, donde perdieron la vida 7 uniformados de la Policía y 48 más resultaron heridos.
La primera hipótesis que manejan las autoridades es que los actos delictivos serían producto de “retaliciones” de bandas criminales a quienes se les ha atacado con contundencia en los últimos días. Sin embargo, el Frente de Guerra Urbano del Ejército de Liberación Nacional (Eln) se atribuyó ayer la autoría del atentado con explosivos contra una estación de Policía de la capital del Atlántico que dejó 5 uniformados muertos y 41 heridos.
"El Eln, en ejercicio legítimo del derecho a la rebelión, realizó la siguiente acción militar (...) se atacaron (sic) fuerzas policiales de la Estación San José", detalló el grupo en un comunicado cuya autenticidad no ha podido ser comprobada.
El primer atentado se registró a las 6:00 de la mañana del sábado en el barrio San José, del sur de Barranquilla, momento en el que un artefacto explosivo fue detonado de manera remota en la Estación de Policía donde alrededor de 50 uniformados formaban para el cambio de turno. Allí perdieron la vida 5 agentes, dos caninos y 41 policías resultaron con lesiones.
Por estos hechos, las autoridades capturaron a Cristian Camilo Bellón Galindo, de 31 años, quien, al parecer, tenía en su poder información sobre dicho atentado. Una vez capturado se adelantó su proceso de judicialización por los delitos de homicidio agravado, tentativa de homicidio, uso de explosivos y terrorismo, se espera que hoy se defina su responsabilidad en los hechos.
Respuesta
Una vez conocida la situación, el general Jorge Nieto, director de la Policía, hizo presencia en el lugar, visitó a sus hombres en los centros asistenciales y se puso al frente de la investigación para esclarecer las causas del atentado. Igualmente, aseguró que la institución ofrece $50 millones para quien brinde información sobre los responsables del atentado.
Sumado al oficial, el fiscal General de la Nación, Néstor Humberto Martínez, también arribó a la capital del Atlántico y desde allí catalogó el hecho como un “acto terrorista” que fue perpetrado por personas que no residen en la ciudad.
Horas más tarde llegó el presidente de la República, Juan Manuel Santos, quien también visitó a los uniformados lesionados y aseguró que la situación padecida en las últimas horas no doblegará a la Fuerza Pública, ni tampoco dará pie para abandonar el deseo de la búsqueda de la paz. Igualmente, indicó que los autores materiales e intelectuales de esta masacre serán llevados ante la justicia para que respondan.
La presencia del Gobierno y de los altos mandos de la Fuerza Pública, generó satisfacción y protección en la ciudadanía. Sin embargo, esta duró poco, en la noche del sábado sobre las 11:30 otro artefacto explosivo fue detonado, pero esta vez el ataque fue a una subestación de Policía de Buenavista en Santa Rosa del Sur (Bolívar) allí el reporte tampoco fue alentador, perdieron la vida dos uniformados y uno más quedó herido.
Y por si fuera poco, en la madrugada de ayer se registró un tercer ataque en el CAI de Soledad 2000 (Atlántico), en el lugar resultaron heridos cuatro uniformados de la Policía y dos civiles. Aunque por fortuna no se registraron víctimas fatales, pero la preocupación por los atentados es la misma.
Conocida la situación de orden público en esa zona del país, en la mañana de ayer se realizó un consejo de seguridad. El acto que fue presidido por el general Jorge Nieto contó con la presencia del ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, y altos mandos de la cúpula militar entre ellos el comandante de las Fuerzas Militares, general Alberto José Mejía.
Análisis
Sobre la hipótesis que manejan las autoridades, en que los atentados podrían ser de autoría del Eln, el analista en seguridad Hugo Acero indicó que aún existe la posibilidad de pactar un cese el fuego con esa guerrilla, pero “bajo unas condiciones que no sean impuestas por esa subversión, sino bajo las condiciones que se venían manejando con los diálogos de Quito (Ecuador) (…) hay que hacerlo y hay que insistir. El Estado no puede bajar la guardia y debe usar todo su poder para arreciar este tipo de acciones”.
En cuanto al mecanismo que debe optar la Fuerza Pública para evitar estas barbaries, el experto aseguró que “el Estado debe trabajar en equipo, bajo inteligencia e investigación criminal. El grupo de trabajo debe estar fortalecido por las Fuerzas Militares, la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación”.
Aseguró también que en contra de los autores intelectuales y materiales de los actos perpetrados debe existir un proceso de extinción de dominio, dónde se afecte las estructuras financieras. “Deben quitarle el dinero mal habido que es la fuente para financiar este tipo de acciones terroristas”.
El experto en Seguridad Nacional e Internacional Jhon Marulanda, indicó que los ataques terroristas registrados generan preocupación no solo desde el punto de vista policial y militar sino también político. El analista alertó que de seguirse presentando estos hechos, el Gobierno podría decretar un estado de emergencia.
“A mi me preocupa mucho que estos hechos se estén dando antes de elecciones, porque el Gobierno podría tomar la determinación de decretar un estado de emergencia y posponer o suspenderlas lo cual sería grave”, dijo Marulanda.
Otra preocupación que manifestó el analista es sobre los actos subversivos que se han tomado las principales ciudades del país, por lo que no descarta que hechos así se vuelvan a registrar y aún más en la capital del país, donde asegura hay células urbanas del Eln.
Sobre la iniciativa de generar otro cese el fuego entre el Gobierno Nacional y dicha guerrilla, el experto aseguró que este se daría bajo las condiciones de presión que están ejerciendo en este momento los subversivos “ellos han venido mostrando una capacidad terrorista, no más haya de la que siempre han tenido, pero si una que presiona al Gobierno, y este para que no se caiga su deseo de la búsqueda de la paz accede a las pretensiones del grupo guerrillero”.
En cuanto a los mecanismos de defensa que deben tener los miembros de la Fuerza Pública, Marulanda aseguró que más allá de una ofensiva militar, el Gobierno debe optar “por incrementar su inteligencia, la alerta de todas sus unidades porque seguramente vendrán más atentados, que a mi modo de ver obedecen a intereses del crimen organizado revueltos con organizaciones ideológicas como el Eln”.
El Gobierno y el Eln iniciaron el año pasado unos diálogos de paz en Quito, pero las conversaciones están suspendidas desde el pasado 10 de enero a raíz de una oleada terrorista de esa guerrilla tras finalizar un alto al fuego bilateral que estuvo vigente durante 100 días.
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