Después de 12 años del cruel asesinato de la abogada Alma Rosa Jaramillo Lafourie, cuyo cuerpo encontraron mutilado en el municipio de Morales, Sur de Bolívar, la Sala Penal del Tribunal Superior de Cartagena condenó por el hecho al exjefe paramilitar Iván Roberto Duque Gaviria, conocido como Ernesto Báez.
La justicia lo encontró culpable de los delitos de homicidio simple en concurso con concierto para delinquir agravado. Al exparamilitar, que tuvo influencia en Caldas con el Cacique Pipintá, lo condenaron a 25 años de cárcel.
Por el mismo hecho fue condenado a siete años de prisión el también exparamilitar Rodrigo Pérez Alzate, quien se acogió al proceso de Justicia y Paz. Deberá pagar de multa unos 6 mil 500 salarios mínimos legales vigentes.
Alma Jaramillo Lafourie era una abogada que litigaba en Morales y en municipios aledaños. La jurista también colaboraba a la comunidad en asuntos privados y, además, hizo denuncias por hechos de corrupción presentados en la administración pública de dicha zona, como explica el fallo condenatorio.
Dichas labores hicieron que en el año 2000 la mujer recibiera amenazas, en las que le advertían que debía abandonar la región junto a su familia o sería asesinada.
El fallo dice que en el 2001 un sujeto conocido como el Llanero, identificado como Wilson Fuentes Cruz, llegó a la casa de la abogada diciéndole que por orden de alias Mario, comandante de los paramilitares en esa región, ella tenía que marcharse.
A la abogada la asesinaron posteriormente, el 29 de junio de 2001. Iba hacia Simití en un vehículo de servicio público y hombres armados que, al parecer, hacían parte de las Autodefensas, la obligaron a bajar. El 30 de junio del mismo año, un día después, encontraron el cadáver mutilado de la abogada, en una finca de nombre San Pedro, en el corregimiento de El Dique.
La sentencia explica que por el homicidio fueron capturados Wilson Fuentes Cruz y José Arnulfo Rayo Bustos, a quienes acusaron de homicidio en persona protegida, concierto para delinquir y tortura agravada. Finalmente fueron condenados por los delitos de homicidio y sedición.
Tras las investigaciones, el 18 de agosto de 2006 aseguraron con cárcel a Iván Roberto Duque Gaviria y Rodrigo Pérez Alzate por los delitos de tortura, homicidio en persona protegida y concierto para delinquir, señalándolos de ser los “autores determinadores” del homicidio de la abogada.
Finalmente, tras un largo proceso de juzgamiento, fueron condenados por homicidio simple. Pérez Alzate recibió una pena menor tras acogerse a Justicia y Paz.
Otros delitos
Alias Ernesto Báez está preso actualmente, respondiendo por otros delitos como homicidio agravado, desaparición forzada, porte ilegal de armas de fuego de uso privativo de las Fuerzas Militares y concierto para delinquir.
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