Grietas en paredes, columnas, vigas, andenes y vías. Dilataciones de hasta unos 10 centímetros. Pisos y enchapes despegados y tubos rotos. Así les está tocando vivir a los vecinos de la construcción del centro comercial Mall Plaza, en el barrio La Carola.
Son 15 casas en las carreras 11A y 11B bis con calle 57, colindan por la parte de atrás con sus patios o paredes medianeras. Dos viviendas ya fueron evacuadas por representar riesgo para sus moradores, en las 13 restantes esperan que la constructora del proyecto les solucione el problema.
Los perjudicados dicen no estar en contra de la construcción, pero sí de la forma como se ha manejado la reparación de los daños. Sostienen que les han dicho que responderán por los arreglos, pero cuando finalice el asentamiento del proyecto.
Indican que el actual contratista terminará en noviembre próximo, según información recibida, y que vendrá otro. “¿A quién le vamos a reclamar? Dicen que desde Bogotá responderían, pero quién garantiza que haya efectividad en las obras, si estando aquí no responden a tiempo”, se pregunta Beatriz Elena Sánchez.
Asustados
“Todo empezó hace un mes y medio después de que hicieron los anclajes del centro comercial. Primero grietas pequeñas, paredes tarjadas, pero ahora hay grietas muy grandes. Me tocó sacar a mi hija de su cuarto porque por las dilataciones le entran viento y animales. Con los temblores de estos días todo el mundo anda nervioso. Fuera de eso, ninguna de mis hijas pueden estar en la cocina, debajo de esta habitación, porque también está agrietada. Hay muros y pisos nuevos, hechos en diciembre, que se están partiendo”, cuenta Jimena Ocampo.
Andrés González es inquilino y narra lo vivido: “Hemos sentido movimientos con sonidos muy fuertes, como si un mazo pegara en el concreto debajo de la casa. Sentimos que se ha inclinado un poco, producto de eso las puertas se mueven hacia la casa vecina, como si fuera efecto dominó. Al amanecer de hoy (ayer) nos despertó un estruendo muy fuerte, fuimos a verificar que los dos niños estuvieran bien, y cuando bajamos al segundo piso notamos que estaba enlagunado, igual el vestier y el baño de arriba. Tiene que ser que se rompió un tubo. Lo único que falta es que se reviente un tubo del gas, y eso sería un problema mayor”.
Beatriz no tiene afectada su vivienda, pero sostiene: “Antes de la construcción las casas y las vías estaban en perfecto estado. Solicitamos a la constructora que hiciera un estudio de alcantarillado y gas natural porque nos preocupa. Es más, las actas de vecindad que nos hicieron al principio del proyecto tampoco nos las han hecho llegar, solo por solicitud de los ocupantes. Del equipo social nos dicen que nos tranquilicemos, pero vemos que sí está pasando y es lo más preocupante. Es una afectación psicológica y física para las familias. Hay que intervenir las casas de forma inmediata y reubicar al que tenga que salir, no se puede esperar a que se caiga un muro o que se pierda una vida”.
La firma indica que desde el inicio del proyecto levantaron 272 actas de vecindad y dispusieron de un equipo de gestión social que se comunica con la comunidad e informa de forma permanente. Además, que implementaron todas las medidas, con consultores geotécnicos, para monitorear los efectos que se puedan producir por los trabajos en desarrollo. Citan mediciones topográficas e instrumentación geotécnica, piezómetros para medir el agua freática subterránea, aplicación de sistemas de drenaje y visualización en terreno y su área de influencia. De este proceso se recomiendan acciones rigurosas en el proceso de contención.
“Las afectaciones menores detectadas en tan solo el 0,04% del total de viviendas, han sido atendidas de manera oportuna con la Constructora Equipos y Cimentaciones, aliado que ha destinado personal en forma permanente y constante para atender cualquier reclamación. Adicionalmente, Mall Plaza ha puesto al servicio del proyecto una persona dedicada a recibir inquietudes y sugerencias de la comunidad”.
Agregan que han estado en contacto con UGR y Bomberos para que conozcan los avances del proyecto, las acciones preventivas y restaurativas tomadas en cada una de las casas, y los trabajos a realizar en áreas públicas.
Según Jairo Alfredo López, director de la Unidad de Gestión del Riesgo (UGR) de Manizales, el 17 de septiembre pasado recibieron una solicitud de esta comunidad por agrietamientos de viviendas, acudieron al sitio para hacer la revisión y encontraron que al parecer son producto de asentamientos por la construcción del Mall Plaza, a quienes les pidieron que adoptaran medidas, como la evacuación de dos viviendas que se encontraban en riesgo de seguir ocupadas por el tamaño de las grietas, y el arreglo de viviendas. Los costos han sido asumidos por la constructora Mall Plaza. También siguen haciendo monitoreos constantes a las grietas, para un total de cinco visitas de Bomberos y tres de ingenieros de la UGR.
“Lo más importante es que cada vez que se presenten estos acontecimientos, la gente llame de inmediato a la línea 119 de Bomberos para hacer una visita y dar recomendaciones, pero ya esto se vuelve un problema entre la constructora y los propietarios de las viviendas, quienes si no logran conciliar deben entrar a adelantar una demanda para exigir que les reparen las casas”.
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