Oscar Giraldo
LA PATRIA | MANIZALES
La indiferencia se dejó ver en Manizales, pese a que también sufre por la violencia contra los líderes sociales, como recientemente ocurrió el lunes pasado contra las mujeres del restaurante del Jardín Botánico de la Universidad de Caldas.
En la capital se reunieron ayer dos grupos que salieron de los parque de La Gotera y del Agua, que cantaron, exhibieron pancartas y arengaron al Gobierno de Iván Duque para que se detenga la matanza.
En la primera manifestación apenas se contaban unas 100 personas, mientras que en la segunda, mucho más nutrida, los que la comandaban les pedían atención a los manizaleños y que supieran por qué marchaban.
Johanna Patiño, de la organización de la marcha, criticó que a Manizales la posicionen como el mejor vividero cuando no hay seguridad para todos y pidió que no se toleren situaciones como la que recientemente ocurrió en la Universidad de Caldas.
"Nos manifestamos contra el genocidio de nuestros líderes sociales y lo que eso significa colectivamente para un país que está en busca de un proceso de paz. Cuando los matan a ellos, está en juego la democracia de todo un país", reclamó.
Su compañera, Juanita Marín, también dijo que con esto quieren demostrar que Manizales no puede ser ajena lo que pasa en el resto del país y más cuando el departamento está sufriendo situaciones similares.
Sin embargo, destacó que hay figuras públicas pronunciándose contra el genocidio, pero falta que los ciudadanos se tomen esto en serio y no sean cómplices con su silencio e indiferencia.
Similar pensó Yenicer Motato, de la comunidad Embera de Riosucio y gobernadora del cabildo indígena universitario de Manizales.
"El apoyo de los líderes es su pueblo y con estas manifestaciones les decimos que no están solos, pueden contar con una comunidad que en su mayoría es indiferente", concluyó.
Al final, ambos grupos se encontraron en el parque Ernesto Gutiérrez, en donde recordaron a las víctimas de los violentos y exigieron mayor protección para que no haya más víctimas.
A nivel mundial
En unas 100 ciudades, incluidos 57 municipios de Colombia, se realizó la manifestación. Según el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), desde el 24 de noviembre de 2016 hasta el 20 de julio de 2019 han asesinado a 765 líderes y excombatientes que se acogieron al proceso de paz.
En Caldas
Entre el 2017 y el 2018, se conocieron los homicidios de tres líderes: Alcibiades de Jesús Largo Hernández, César Augusto Parra Cortés y Jesús María Morales Morales.
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