
MÓNICA FRANCO
LA PATRIA | MANIZALES
El fallo de la Corte Constitucional que le exige al Instituto de Bienestar Familiar (ICBF) garantizar el pago del salario mínimo a las madres comunitarias las tiene contentas. En Caldas se trabaja en ese propósito desde julio pasado.
Una beneficiaria comenta que, aunque reciben felices la noticia falta información sobre qué les garantiza el fallo.
Olga Herrada, presidenta del Sindicato de madres comunitarias en Caldas, dijo que el reconocimiento salarial se logró después de muchos años en los que lucharon contra todas las formas de discriminación y desigualdad a las que han sido sometidas durante mucho tiempo.
Según ella, muchas no tienen claridad de lo que es el fallo y a quiénes aplica, y ese es el mayor inconveniente para lo que viene. Por ello se reunió ayer la asamblea del gremio en un salón del templo de Fátima.
Se habían adelantado
"La idea es tener claro qué beneficios tendremos y cómo va a funcionar el pago, para sentarnos la otra semana en Bogotá con el ICBF y con la Mesa de Madres para tener cosas más concretas", dice Herrada.
El director del ICBF en Caldas, Luis Eduardo Céspedes, indica que no los sorprende la decisión de la Corte y que por fortuna el instituto había comenzado a implementar la estrategia De cero a siempre y la creación de los Centros de Desarrollo Infantil (CDI) con los que ya trabajaban para dignificar los salarios para estas mujeres.
"La idea es que las madres migren a los CDI transformados para que empiecen a operar. Allí pasan con $890 mil de sueldo y prestaciones sociales, cuando lo hacen como educadoras con el curso de Primera infancia, o con el mínimo cuando pasan como auxiliares", explica Céspedes.
Sobre los CDI
Céspedes asegura que en Caldas, desde que empezaron con ese proyecto, tenían a 216 madres ganando el salario mínimo, que representan el 40% de las 540 que ya estaban vinculadas a los CDI. "Lo que falta ahora es acelerar la transformación de los Centros e incluir a unas 850 madres comunitarias más las de hogares Fami, para que queden en el esquema de vinculación salarial".
Herrada manifiesta que lo que ellas quieren es quedarse trabajando en sus casas, pues muchas son mayores de 55 años y los CDI implican mayores esfuerzos, por ejemplo de movilidad. Agrega que desconoce los beneficios que traen estos centros, pues ha recibido quejas de compañeras que dicen que no se les pagan lo que se les promete, además de que a los CDI se les ha invertido dinero y a ellas las han dejado sin mayores privilegios. "Lo que no queremos es perder la razón social como madres comunitarias y al migrar a los Centros así sería".
Sobre eso Céspedes afirma que la experiencia en Caldas con los CDI ha sido exitosa y que no es que cambie la razón social, que se las daba la misma comunidad, sino que pasan a trabajar bajo contrato laboral. También indica que ellas siempre van a ser madres comunitarias independientemente de dónde presten sus servicios.
"Solo hay 10 madres, que pertenecen al sindicato, que han mostrado descontento, de resto todas están interesadas por migrar a los CDI", concluye el funcionario.
Herrada dice que por ahora, además de estar satisfechas con la decisión de la Corte, esperan aclarar muchas dudas y llegar a los mejores acuerdos que beneficien al gremio, a padres de familia y a los niños.
En cifras
* Los Centros de Desarrollo Infantil (CDI) operan en Caldas desde julio pasado. En los 51 que tiene el departamento se atienden alrededor de 9 mil niños y hay vinculadas 540 madres comunitarias.
* De esos CDI Manizales cuenta con 24, en los que trabajan por lo menos 200 madres.
* La idea es tener listos en octubre próximo otros CDI en Caldas.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015