Los infis deben atraer inversión, más que servir de intermediarios

Foto | Darío Augusto Cardona | LA PATRIA
Infimanizales acaba de recibir una propuesta de un privado para un proyecto urbanístico en la Baja Suiza, que está en análisis.

ALEXANDRA SERNA Y LUIS FRANCISCO ARIAS
LA PATRIA | MANIZALES

Que Infimanizales e Inficaldas se enfoquen en atraer capital nacional y extranjero para la ciudad y el departamento, aparte de realizar inversiones en proyectos estratégicos, debe ser la prioridad para los llamados bancos de segundo piso.
Esta fue la principal conclusión del conversatorio que LA PATRIA realizó ayer sobre cómo replantear la vocación de esas entidades, cuestionadas por el Concejo Municipal, la Asamblea de Caldas y los demás organismos de control por la poca rentabilidad de los proyectos a los que están vinculados.
En el Concejo se formó hace un mes una comisión accidental para analizar la inviabilidad de Infimanizales, aunque como afirmaron la gerente, Luz Estela Cardona, y el concejal Hernán Alberto Bedoya (de la U), que participaron en el conversatorio, la entidad aún es sostenible. No obstante, la delegada de la Contraloría Municipal, María Cristina Pérez, recalcó que preocupa la lentitud del retorno de las inversiones en Aerocafé, Transporte Integrado de Manizales (TIM), Procuenca y Zona Franca.

El planteamiento

La delegada de la Contraloría recordó que los infis fueron creados, entre otros aspectos, para ofrecer alternativas de créditos para entes oficiales, dedicándose luego a servir de intermediarios ante la Findeter o la banca comercial. La desventaja es que esta última llegó a bajar tanto sus tasas de interés que las mismas entidades territoriales ya sopesan entre los infis y los bancos, optando algunas veces por los privados.
"La madurez máxima de un Infi ya no está en la intermediación financiera, sino en traer dineros a la región a través de las regalías o las alianzas público privadas, y en últimas realizar inversiones propias. Con lo que no estoy de acuerdo es que Infimanizales tenga que ser el ejecutor de las obras civiles, pues para eso están los terceros", aseveró Cardona.
Otra alternativa para ingresar recursos pueden ser los contratos plan, como el que formulan las gobernaciones de Caldas y Antioquia para ejecutar inicialmente proyectos viales, y que permiten a las regiones sumar esfuerzos y acceder a fuentes nacionales.
Para el concejal es clave que cualquier proyecto que se formule esté lo suficientemente sustentado desde lo técnico. "El que me genera serias dudas es Zona Franca, empezando porque no cumple con la condición de estar sobre un corredor logístico, sino que debió ubicarse en el Kilómetro 41 o en la vereda El Rosario", sostuvo.

Las cartas de juego

Cardona admitió que una debilidad de Infimanizales ha sido la parte técnica a la hora de formular proyectos, y que ha faltado claridad desde el principio sobre qué porcentaje del retorno va para la entidad y cuál para la ciudad. "Es preferible definir que si un proyecto no va a generar rentabilidad económica, justificar cómo lo hará socialmente", agregó, haciendo referencia al cable aéreo Fundadores - Los Cámbulos.
La gerente expuso que las medidas de la actual Administración apuntan a la austeridad y a retomar el control de las inversiones, incluso en proyectos en que son minoría en las juntas directivas. En lo corrido del año han hecho que 10 empresas, en las que participan, reestructuren el personal, por ejemplo en TIM. Cardona está de acuerdo con que esta última entidad sea liquidada, pero la decisión final depende de cómo se asuman las deudas pendientes, como la de $12 mil millones en que Infimanizales es el codeudor.
También se refirió a la liquidación en curso de cuatro empresas (Asociación Creer, Corporación Los Yarumos, Unión Temporal parador La Esperanza y Unión Temporal Los Nevados), asegurando que esto les ahorrará dinero. Concluyó con que ejercicios como el show room, realizado en noviembre pasado con 43 firmas de inversionistas, les abrirán nuevas puertas financieras.

Le falta músculo a Inficaldas

Aunque el gerente de Inficaldas, Marcelo Mejía, se excusó de asistir al conversatorio, acudió el presidente de la Asamblea de Caldas, Jorge Luis Ramírez, quien sostuvo que es necesario hacerle ajustes a la entidad para que sea en realidad un organismo que tenga el músculo suficiente para impulsar grandes proyectos regionales. Dijo que fue conveniente su transformación en el 2008 (antes era Fodecal), pero que aún no se le ha dado la dimensión que requiere. Mencionó experiencias como la de España, que logró desarrollos en infraestructura gracias a modelos como los de los infis. Agregó que la entidad se pone en riesgo con los $30 mil millones que le adeuda el Departamento, que prestó para el Plan Vial y que debe pagar con vigencias futuras.