Invadieron un lote en Solferino para reclamar vivienda

ALEXANDRA SERNA
LA PATRIA | MANIZALES

Unas 280 personas invadieron entre el pasado miércoles y ayer un lote del Solferino, que limita con Sinaí, y por donde hace varios años corrió una avalancha que arrasó vidas humanas. Ambos barrios son de la Comuna Ciudadela del Norte. La cifra la dio un vocero de los ocupantes, Rafael Antonio Hurtado.

La invasión está al frente de la carrera 7B con calle 53. Parece un campamento, pero de cambuches. Plásticos, cobijas, cortinas, costales e icopor hacen de paredes y techos, mientras las columnas son guaduas, ramas de árboles y pedazos de madera. El lote lo parcelaron con pequeños palos, hilos y cabuya. Hasta hay banderas de Colombia semejando una conquista.

"Somos conscientes de que somos invasores, y si nos desalojan no nos opondremos. No queremos nada a la fuerza, sino que hacemos esto para reclamar el derecho a una vivienda digna", dijo Hurtado.

Aseguró que todos son arrendatarios de la Comuna, de los barrios Solferino, Comuneros y La Unión, que no pretenden que les regalen las casas, sino que las puedan pagar con la cuota del alquiler.

Hurtado recordó que ya habían invadido en 2008, en un morro cercano, y que los sacaron. "El alcalde nos prometió una solución de vivienda, pero nos incumplió", agregó. Su hermana, Luz Estela, justificó la ocupación del terreno con que si las casas gratis del Gobierno Nacional no van a ser para ellos, tienen que acudir a las vías de hecho para que les pongan cuidado.

LA PATRIA también observó una pequeña invasión en el Sinaí, en la carrera 7K con calle 55. Levantaban tres estructuras de guadua y esterilla.

Momentos de tensión

La Policía estuvo desde ayer, muy temprano, hablando con los integrantes de la Junta de Acción Comunal (JAC) de Solferino. Rodrigo Alzate, uno de ellos, expresó que acompañaba a esa comunidad porque les habían incumplido con las casas, pero que estaban dispuestos a mediar con la Alcaldía para desalojar el sitio sin inconvenientes. No obstante, los voceros de los invasores los instaban para que no creyeran en los líderes de la JAC.

A las 11:00 de la mañana, la Policía cerró las vías aledañas para evitar que pasaran más Cosmobús. "También para que la gente no entrara más material", agregó Paula Andrea Sánchez, secretaria de

Gobierno Municipal, que llegó al mediodía al sitio con Juan Carlos Barrera, secretario de Medio Ambiente.

Las autoridades trataron de concertar con los invasores que salieran voluntariamente, porque "es una ladera de protección ambiental y de alto riesgo, y además están talando árboles para levantar las estructuras", señaló Barrera.

Aún no se habla de desalojo. La secretaria de Gobierno dijo que esperarían un "tiempo prudencial" para decidir finalmente qué harán, aunque la medida definitiva está en manos de Medio Ambiente, adonde se trasladó el control de las laderas.

"Los de la Alcaldía nos dijeron que levantáramos la invasión y ahí sí nos ayudaban, pero sin un documento firmado no nos vamos", concluyó Hurtado.

Los desalojaron a la fuerza

El 17 de octubre de 2012 la Policía tuvo que entrar a la fuerza a una invasión en Bajo Cervantes para sacar a 29 familias y para que obreros del Municipio derribaran 14 cambuches. La Alcaldía se comprometió a ofrecerles programas sociales.