Habitantes de la vía a El Guamo están vivos de milagro

LAURA SÁNCHEZ
LA PATRIA | MANIZALES

La alerta de desbordamiento de la quebrada El Guamo fue muchas veces advertida, sin embargo los habitantes del sector no quisieron evacuar hasta el lunes en la noche.
Desde hace mucho tiempo las familias conocían el riesgo por la ubicación de sus viviendas a orillas de la quebrada, hasta que la avalancha destruyó seis casas y dejó 50 más afectadas.
Yeimy Calderón, de 22 años, que habitaba la casa 17, recuerda: "la cañada estaba sonando fuerte y alcanzamos a salir por la puerta". Otros lo tuvieron que hacer por ventanas y techos.
Dora Ramírez, quien estuvo mirando desde su corredor cómo la creciente aumentaba, con piedras y ramas, vio cómo su casa fue empujada de repente por la avalancha. "Ahí mismo entré por mis tres hijos y los llevé a donde un vecino. Allí también llegó la segunda avalancha, por lo que nos tocó seguir hasta más arriba, donde otra vecina", relató angustiada.
Como consecuencia de la emergencia, que surgió de un deslizamiento en la parte alta de la quebrada El Ocho, afluente de la quebrada El Guamo, 376 personas fueron evacuadas, 103 hombres, 118 mujeres y 155 niños, según en censo realizado ayer en la mañana por la Cruz Roja Caldas.
Desde temprano los damnificados empezaron a sacar sus enseres, incluso hubo personas que no durmieron en el Cisco, donde fueron trasladados para que pasaran la noche, con el fin de evitar que les robaran.
Luis Octavio García, que ocupaba la casa 13 C, en donde vivía con su mamá, dos hermanos menores y un hijo, permaneció a la intemperie. "Queríamos cuidar nuestras pertenencias", expresó.
Para los trasteos la Secretaría de Gobierno Municipal habilitó seis camionetas y una de la Policía. Además, durante la mañana ofrecieron 400 refrigerios para las 122 familias, que desde ayer comenzaron a recibir subsidios del $250 mil pesos para el primer mes de arrendamiento.

¿Para dónde ir?
La gran incertidumbre de los afectados es su destino, pues saben que no podrán volver a sus hogares en El Guamo.
Roger García, un adulto mayor, que trabaja como arenero en esa quebrada, miraba desde el filo dos palos mojados y un arrume de tejas quebradas que antes eran parte de su casa, la tercera que el cauce le desaparece. Recordó que en 25 años ha sobrevivido a cerca de 20 emergencias invernales, como la que azota a la ciudad.
Asegura que en cada emergencia le dan orden de evacuación y ayudas que solo le sirven por unos meses. Cuando se le acaban, le toca volver a esa zona, que siente suya. Roger, quien es analfabeta, dice tener un documento que le daría derechos sobre la posesión del lote.
Como él, varias familias han soportado más de dos o tres emergencias invernales en ese punto. Resulta inexplicable cómo esas personas siguen exponiendo sus vidas y la de decenas de niños que habitan el sector. Además también surge el interrogante ¿por qué, sí esta zona es tan peligrosa, no hay ningún organismo que controle e impida que habiten en ella?

Lesionados
Aún permanecen hospitalizados dos de los 11 rescatados de la creciente de la quebrada y de un deslizamiento en las canchas de tejo de Bosques del Norte.
María del Rosario García, de 31 años, continúa en el Hospital Santa Sofía a la espera de una cirugía, y Mariela Suárez, de 71, recibe oxígeno en el Centro Piloto de Assbasalud, indicó Ricardo Castaño, coordinador de la Red Local de Urgencias de Manizales.

Manizales en alerta roja
El incremento de lluvias y la saturación de los terrenos llevó a que el Consejo Municipal para la Gestión del Riesgo de Desastres (CMGRD) declarara ayer la alerta roja en Manizales.
Estaba en naranja desde el pasado viernes, pues el acumulado de lluvias de los últimos 25 días había superado los 300 milímetros. Hasta ayer iba en 328. Aunque la alerta roja se da cuando la cifra supera los 400 mm, el CMGRD consideró que era mejor adelantar esa declaratoria, ante las constantes lluvias y estragos, en particular con lo sucedido en la vía antigua a El Guamo.
Óscar Toro, jefe de la Unidad de Gestión del Riesgo, explicó que esa alerta implica estar más atentos, con los cinco sentidos. Bajo lupa están La Avanzada, vía antigua a El Guamo, Bengala, salidas de Manizales a Chinchiná (por vía antigua y la Doble Calzada), conexión con Villamaría y vía Panamericana, donde han ocurrido deslizamientos en días recientes.
También se declaró la figura de calamidad pública para toda la ciudad. El pasado domingo se estableció para el barrio La Avanzada, pero se amplió para beneficiar a los afectados de la quebrada El Guamo y como prevención de futuras emergencias.
Toro agregó que esa figura permitirá buscar más recursos ante el Gobierno Nacional.

Qué es calamidad pública
Sandra Calvo, jefe de Prensa de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, explicó que es un recurso legal que le permite a las alcaldías contratar las ayudas humanitarias de modo más rápido, sin hacer licitaciones, para atender emergencias. Faculta para hacer un trabajo rápido en una zona afectada, que incluye ubicación de afectados, evacuaciones y proyectos de estabilización.

El dato
Hoy se cumplen 10 años de la tragedia invernal del barrio La Sultana, en la que murieron 16 personas y 14 viviendas fueron destruidas por un deslizamiento de tierra. Actualmente existe una demanda de los familiares de las víctimas ante el Consejo de Estado, en procura de una indeminización.