LA PATRIA | MANIZALES
Las versiones de las partes no coinciden. Lo cierto es que 11 estudiantes del Colegio San Luis Gonzaga, de entre 5 y 7 años, que se desplazaban ayer en un microbús de Transloyola se pegaron tremendo susto cuando el vehículo frenó en seco en la vía detrás del colegio INEM Baldomero Sanín Cano.
A seis de ellos los llevaron a la Clínica Santillana por los golpes que habían sufrido, junto a la acompañante (adulta), y les dieron de alta en el transcurso de la mañana. La última persona aporreada salió a la 1:00 de la tarde.
José Orlando Herrera, director de Bienestar Estudiantil del San Luis, explicó que en la curva donde fue el incidente, a las 7:40 de la mañana, había personal controlando el paso de vehículos por unas obras que hace Aguas de Manizales a un lado de la vía.
“Cuando la señora con la paleta verde le dio el paso al conductor, este siguió sin darse cuenta de que había una tapa de alcantarilla que estaba corrida un poco de su lugar. Con la llanta izquierda pisó el borde de la tapa que saltó del piso y esto hizo que el conductor tuviera que frenar de ipso facto. Me avisaron y llegué de inmediato, y el conductor me dijo que obreros de la obra habían acabado de correr la tapa sobre el orificio”.
Wílmer Mauricio García, que trabaja en la adecuación de un interceptor en el sector (canalización de aguas residuales), fue testigo del hecho. “El microbús iba rápido y cuando pasó por la alcantarilla pegó un brinco. La tapa quedó volteada”. Él y Jorge Eduardo Castillo, supervisor externo de la obra, aseguraron que la tapa no estaba corrida.
Alejandro Estrada, subgerente técnico de Aguas, indicó que esas tapas de cemento no pueden ir fijas porque se podría presurizar la red de alcantarillado y que la única manera de que se levanten es que llueva fuertemente. “La tapa a la que hacen referencia estaba en su lugar. Para que el conductor hubiera frenado de esa manera, presumo que iba a una velocidad considerable”.
Lo que negó el directivo del colegio, pues como había personal controlando el paso, el vehículo tuvo que ir más despacio. “Si no hubiera sido por esto, el incidente pudo haber terminado peor”.
El subgerente técnico de Aguas agregó que en la ciudad están cambiando las tapas de cemento por otras de prolipropileno (tipo de plástico), que podrían evitar nuevos incidentes.
El pasado 28 de enero una buseta intermunicipal se volteó cerca a la estación de servicio San Juan en la Vía Panamericana, según la Secretaría de Tránsito, por una alcantarilla sin tapa y cuya valla de precaución estaba mal ubicada. Ese día se lesionaron siete pasajeros.
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