"Quisiera que fuéramos testimonio, que con nuestra vida diéramos el mensaje que muchas veces decimos con las palabras. No sea que con las palabras digamos cosas muy hermosas, y con la vida destruyamos lo que decimos".
La frase es del Arzobispo de Manizales, monseñor Gonzalo Restrepo Restrepo, y va dirigida a todos los sacerdotes de la Arquidiócesis, como parte del mensaje que dio en la Misa Crismal del pasado jueves.
Esta misa, que se celebra anualmente ocho días antes de la Semana Santa, es una ocasión para que todos los sacerdotes renueven las promesas sacerdotales. "Por eso fue un día de fiesta para todos nosotros, un día de unidad", dijo el arzobispo.
Otra parte del mensaje para los presbíteros es ser testimonio de amor, de unidad, de perdón, de paz, de sencillez y de humildad.
A los fieles católicos les pidió mucha oración por los sacerdotes, para que los jóvenes quieran ser sacerdotes; también para que se busque la paz y sean artesanos de la paz verdadera. "Que realmente seamos instrumentos de paz en el país".
A un día para que se inicie la Semana Mayor, el arzobispo envió la siguiente reflexión: "Para todos, mis mejores deseos. Que vivamos una semana en la que le abramos el corazón a Dios y le pidamos que nos ayude a tenerlo siempre con nosotros, y que pase lo que pase en nuestro país, no nos dejemos robar la paz, el perdón y la fe en Dios".
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