16 días de resistencia en la invasión del Kilómetro 41

LAURA SÁNCHEZ
MANIZALES | LA PATRIA

En condiciones precarias de sanidad y temperaturas de unos 25 grados centígrados en promedio permanecen alrededor de 300 familias que invadieron dos hectáreas de la hacienda Potrerillo desde el pasado 11 de julio.
El predio pertenece actualmente a la Dirección Nacional de Estupefacientes (DNE) por ser extinción de dominio a alias el Osito.
Blanca Nazaret Diosa llegó al lugar por aviso que dieron, voz a voz, sus vecinos en la vereda Kilómetro 41 para ocupar rápidamente ese espacio. Blanca vive con dos hijos y su papá, en su casa improvisada con guaduas y plásticos, de la que espera sea su hogar definitivo.
Ella se dedica a la minería junto con su esposo, que a razón del paro minero concentrado en la vía a Medellín, entrada al municipio de Marmato (Caldas), no tienen dinero para el sustento diario y están sometidos a la caridad de sus vecinos de invasión.
Cinco letrinas hechas en la invasión resuelven por el momento las necesidades sanitarias, además de dos pozos de agua que usan para el consumo diario.

Dificultades
A pesar de ser una invasión, la Alcaldía de Manizales ha estado presente a través de las secretarías de Medio Ambiente y Salud. Acciones como la vacunación antirrábica, desparasitación de las mascotas y la toma de muestras de agua de los pozos para evaluar la calidad, hacen parte del seguimiento al asentamiento.
Juan Carlos Barrera, secretario de Medio Ambiente, invita a no consumir el agua sin hervir previamente, porque no se conocen las condiciones reales del líquido.
Las familias construyen con pocos recursos sus casas, además de haber distribuido los lotes equitativamente entre todos y planear espacios de esparcimiento como una casa cultural, un puesto de salud, parques e incluso una iglesia.
Algunas personas que se identifican como parte de organizaciones no gubernamentales (ONG) hacen presencia en el lugar, ayudando a la distribución del lote y a la participación de las familias. A lo anterior, la secretaria de Gobierno Municipal, Paula Andrea Sánchez, no conoce la presencia de ninguna ONG ni avala la repartición del lote, que está ocupado ilegalmente.
Sobre el posible desalojo al que se encuentran expuestos los ocupantes aún no hay respuesta concreta de la DNE, sin embargo las familias piden considerar la opción de asentamiento legal por su estado de vulnerabilidad, mientras continúan la construcción de sus viviendas.
Ayer, la invasión Ángel de la guarda, como bautizaron algunos de ellos el terreno, definió dos planchas de candidatos para una junta directiva que ayude a la gestión correcta de recursos.

Pulso frente a un desalojo
Los ocupantes de la hacienda Potrerillo respondieron a LA PATRIA qué harán ante un posible desalojo.

María Alexis Escobar
Si lo piden, yo salgo. Por lo menos tengo salud para seguir en la lucha.

Jhoimar Tabar Quino
No nos movemos, tenemos que ver la casa hecha.

María Rosalba Castrillón
No pondré resistencia. Es difícil para uno solo, soy viuda con dos hijos.